Tecnológicas y automotrices se pelean por este mineral, usado en la fabricación de baterías de celulares, notebook y autos eléctricos. En el norte argentino abunda, pero falta la plata. Gobernadores se reunieron con directivos chilenos para que pongan manos a la obra. ¿Qué otras firmas ya operan?
Como tantas otras veces, la Argentina da espacio a situaciones cuanto menos insólitas.
En esta oportunidad, el caso responde a la cesión de activos estratégicos en términos económicos; esto es, un hecho que se ha observado en diferentes capítulos de la historia local.
Ahora, el traspaso cobra un nuevo impulso. Y, curiosamente, comprende a una de las llamadas materias primas del futuro dado que, por su condición, el compuesto está entre los más codiciados por las principales tecnológicas y automotrices.
Este mineral, del que Argentina posee uno de los escasos reservorios existentes en todo el planeta, está muy cerca de ser explotado -paradójicamente- por uno de sus rivales en lo que hace a disponibilidad de esta riqueza.
En efecto, tanto representantes de la diplomacia argentina como gobernadores de las provincias del noreste acaban de elevar pedidos y propuestas para que sean las empresas chilenas las que controlen la explotación de litio en Salta, Jujuy y Catamarca.
El país trasandino viene a ser, precisamente, el gran rival a vencer en la carrera por industrializar este mineral, cuyas mayores reservas se concentran entre estas dos naciones junto con Bolivia que, a diferencia de las ya mencionadas, todavía no comenzó a extraerlo.
El litio es el material más dúctil y rendidor en lo que hace a la fabricación de baterías para equipos electrónicos y autos de nueva generación, entre otros muchos usos.
La profunda inclinación que muestran las automotrices por la producción a mayor escala de vehículos híbridos, sumado a la demanda que proviene del sector tecnológico, permiten anticipar la explosión de un negocio multimillonario asociado a este mineral.
Hoy, Argentina aparece como el tercer productor mundial de litio, pero tiene potencial para transformarse en el primero.
Las zonas que gozan de la mayor riqueza de la llamada «commodity del futuro» se ubican en el norte argentino, principalmente en los salares de Salta y Jujuy.
La decisión de proponerle a capitales chilenos que se hagan cargo de la explotación tuvo su primera escalada cuando, hace unos días, el propio embajador argentino oficializara en la nación presidida por Sebastián Piñera el interés local de atraer a mineras de ese país.
«Hay un marcado interés de buscar que algunas empresas chilenas con más experiencia exploten los yacimientos de litio, con todo lo que tienen. Sobre todo de parte de las provincias del norte, donde hay reservorios comprobados muy importantes», manifestó Ginés González García.
«La experiencia y el conocimiento de Chile resultan muy superiores a los nuestros. Van a ir llegando los gobernadores argentinos a Chile porque nuestra misión es acercar a los dos países», agregó.
PROVINCIAS A LA CARGA
En ese sentido, el primer paso ya lo dio el gobernador de Salta Juan Manuel Urtubey, quien invitó formalmente a la trasandina Sociedad Química y Minera (SQM) para que explore en los salares de ese distrito.
Para dar una idea de la talla de esta empresa, cabe consignar que SQM es el mayor productor mundial del mineral y concentra sus principales yacimientos al norte de Chile, cerca de Antofagasta.
La firma cuenta con 12.000 empleados y factura anualmente unos U$ 2.000 millones, con exportaciones concentradas en Corea del Sur y China.
Pero estos movimientos no terminan ahí: el empresario Andrónico Luksic, del grupo económico más grande de Chile, también comenzó negociaciones para operar en Salta.
El grupo Lucksic posee un capital de U$ 20.000 millones, y controla desde la filial trasandina de Shell hasta el Banco de Chile, pasando por las cerveceras Austral, CCU, Kunstmann y la alimenticia Luchetti.
Desde la Cámara de Minería de Salta su titular, Facundo Huidobro, señaló a iProfesional.com el tenor de estas inversiones en camino. «Los proyectos planteados comprenden a zonas como Sal de Vida o el Salar del Hombre Muerto. Y cada iniciativa que se baraja implicará inversiones de, como mínimo, u$s200 millones», dijo.
«Se está trabajando mucho con la Gobernación para reactivar tanto el ferrocarril como las rutas, a fin de concretar estos proyectos. Hay regiones de Chile muy interesadas en hacer en breve estas inversiones. La estrategia ahora pasa por lograr bajar los costos de producción. El mineral, el recurso, ya sabemos que está acá. Falta lo otro», agregó.
HASTA SE REACTIVA UN TREN
El interés por atraer al capital chileno es tan fuerte que el mismo Urtubey se comprometió a reactivar un servicio ferroviario que facilite la exportación del mineral.
Al respecto, el gobernador mantuvo una serie de reuniones con autoridades y empresarios chilenos con el fin de impulsar la línea que une Antofagasta y Salta.
Según información difundida por la gobernación salteña, gracias a estas gestiones se firmará un convenio con la empresa Ferronor, que determinará los trabajos que se ejecutarán para impulsar este servicio.
La reactivación del tramo, que está inactivo desde hace algunos años, es una prioridad para esa parte del país, ya que es una vía de transporte fundamental para la exportación hacia mercados asiáticos.
En declaraciones posteriores, Urtubey se mostró confiado en lograr estos avances y dejó entrever que tuvo una buena receptividad por parte de Chile.
El ímpetu por atraer a inversionistas trasandinos y la relevancia del litio, de cara a las próximas décadas, da lugar a una pregunta: ¿Argentina no puede por cuenta propia explotar este mineral clave tan asociado con la evolución tecnológica?
Huidobro, de la Cámara de Minería salteña, brindó precisiones al respecto: «Tanto la explotación como otras cuestiones implican inversiones de alto riesgo y eso significa desembolsar cientos de millones de dólares de antemano. La Argentina carece de capitales privados para enfrentar eso y, además, también prevalece una mentalidad que es la de pensar a corto plazo», aseguró a iProfesional.com.
El empresario, quien además integra Gemera -la cámara que agrupa a las mineras exploradoras de la Argentina-, sostuvo que «pensar en una inversión de u$s200 millones, sólo para iniciar un proyecto, es algo casi imposible dentro del marco vigente».
Para Huidobro, los cambios en las reglas de juego atentan contra el surgimiento de cualquier iniciativa nacional de mediana escala.
«Es imposible planificar con pautas que se modifican, como lo sucedido con el control sobre el dólar, la mayor injerencia estatal sobre el sector privado o las trabas a las importaciones. Las grandes empresas internacionales miden estos riesgos», recalcó.
AVANZADA EXTRANJERA
Más allá de este intento puntual por atraer capitales chilenos, lo cierto es que a principios de este año iProfesional.com dio cuenta del avance foráneo en las zonas que ya se conocen por su riqueza en litio.
En este sentido, este medio comprobó que la presencia de compañías del exterior en áreas con presencia de este mineral:
• Salar del Rincón (Salta): el yacimiento está bajo el control de Ady Resources, una firma australiana.
• Salar de Olaroz (Jujuy): pertenece a la australiana Orocobre, que posee un acuerdo con la asiática Toyota por el cual se compromete a proveerle litio argentino para el desarrollo de baterías orientadas a autos eléctricos.
• También en Salar de Olaroz (Jujuy) opera Minera Exar, una firma controlada por la autopartista canadiense Magna y la japonesa Mitsubishi.
• Salar del Hombre Muerto (límite entre Catamarca y Salta). Este yacimiento está operado por la canadiense Lithium One.
• Salar de Diablillos (Salta): está bajo el control de Rodinia Lithium, una empresa de capitales canadienses.
• Salares Incahuasi, Pocitos y Arizano (Salta): operados por la ya mencionada Minera Exar, vinculada con Magna y Mitsubishi.
• Salar Centenario (Salta): cuenta con exploración a cargo de Bolera Minera, una compañía controlada por la francesa Bolloré.
• Salar Chancarí (Jujuy): capitaneado por Bolera Minera, en lo que hace a búsqueda y extracción de litio.
• Salinas Grandes (superficie compartida por Salta y Jujuy): está bajo el dominio de South American Salars, firma perteneciente a la australiana Orocobre, y Bolera Minera.
• Salar de Pozuelos (Salta): tiene habilitación para la búsqueda y explotación extendida a Ekeko, una empresa vinculada con capitales coreanos.
• Salar de Llullaillaco (Salta): el rastreo y potencial extracción de litio en la zona está en poder de Minera Solitario Argentina, firma subsidiaria de la canadiense TNR Gold.
LA IMPORTANCIA DEL LITIO
El litio es el mineral con que se hacen las baterías que dan energía a aparatos tan diversos como las notebooks, celulares y automóviles eléctricos.
Sólo la demanda para producir baterías de autos eléctricos movió u$s32 millones en 2009, pero de cara a 2020 esta cifra podría trepar a u$s74.100 millones, según cálculos de consultora internacional A.T. Kearney.
Por lo pronto, según PWC, al finalizar 2012 las grandes terminales automotrices del mundo habrán lanzado al mercado 42 nuevos modelos de autos eléctricos.
Esta cifra de cuenta del crecimiento exponencial de la demanda para la fabricación de baterías.
Dado que Argentina, Bolivia y Chile controlan casi la totalidad de las reservas mundiales del mineral, trascendió que las tres naciones podrían configurar una organización similar a la que nuclea a los países productores de petróleo, con el objetivo de establecer las reglas de juego que rijan al sector.
Patricio Eleisegui