El estadounidense Jerrod Hunter Schmidt, residente en el estado de Arizona, fue condenado a 37 meses de cárcel por las autoridades de su país, por haber «amenazado de muerte» al presidente Donald Trump.
El hombre de 39 años de edad fue encontrado culpable en septiembre de este año por un jurado federal, de dos cargos por amenazar al presidente de Estados Unidos y dos cargos por hacer comunicaciones interestatales con amenazas.
De acuerdo con medios norteamericanos, expresamente Schmidt amenazó de “matar al presidente Trump y poner una bala en su cabeza”. Por ello, pagará condena en el Buró de Prisiones, seguido de tres años de liberación supervisada.
Las intenciones del hoy condenado quedaron registradas luego de realizar una serie de llamadas al asistente de la oficina de la corte, entre el 10 y el 11 de abril, justo después de saber que su condena por un delito previo fue conformada por la Corte de Apelaciones de Nebraska.
Los oficiales confirmaron que Schmidt hizo los mensajes de voz y notificaron a las agencias federales, estatales y locales apropiadas, según muestran los documentos de la corte federal.
La investigación en este caso, detalló el canal Tucsonnewsnow, la realizó el Servicio Secreto de los Estados Unidos, con la asistencia del Servicio de Inspección Postal y la Patrulla Estatal de Nebraska. La fiscalía fue manejada por David Pimsner, Fiscal Federal Adjunto, Distrito de Arizona, Phoenix.
Schmidt pasa a engrosar la lista de personas que han recibido castigo y condena por amenazar al presidente norteamericano. Sin embargo, la noticia ha tenido poca cobertura, por tratarse de un mandatario que no se las piensa para arremeter contra los medios que osan señalarlo.
De la palabra a la acción…
En junio de este año, un joven de 26 años de edad también fue protagonista de la cacería de las autoridades, luego de haber expresado en las redes sociales su deseo de acabar con la vida de Trump.
El sujeto lleva por nombre Shawn Christy, de McAdoo, Pensilvania. A mediados de año escribió en su muro de Facebook lo siguiente: “Sigue así Morganelli, prometo que pondré una bala en tu cabeza tan pronto como ponga una en la cabeza del presidente Donald J. Trump. Recuerda de dónde vienes punk”.
Aunque después eliminó el mensaje, la Fuerza de Tarea de Fugitivos de los Mariscales de Estados Unidos y el FBI emprendieron una búsqueda inmediata sobre Christy, alegando que estaba armado y es peligroso. Posteriormente fue capturado en Ohio.
A comienzos de 2017, Dominic Joseph Poupolo, de 51 años, fue arrestado después de haber publicado un video en Twitter en el que manifestaba que mataría al presidente Trump con un rifle de alta potencia en una ceremonia en Washington D.C.
Incluso, hasta el diario The New York Times ha “amenazado” de muerte al Jefe de Estado, según una nota en su versión impresa, de Evan Thomas, titulada «¿Trump pone a espías contra espías?», en la que se ve a Trump apuntado por una mira de un francotirador.
Intocable hasta en el verbo
El presidente Trump, al igual que todos los jefes de Estado del mundo, no escapa de un atentado magnicida o una que otra amenaza de muerte, pero hay algo que lo diferencia de sus homólogos: su constante arremetida y errático verbo para con todo aquello que le resulte incómodo o una virtual amenaza para sus propósitos.
Su mala relación es con todo, con los medios, autoridades, ministros, figuras públicas, celebridades y, en el particular de las amenazas de muerte, se pueden mencionar los altercados que ha protagonizado en el pasado con dirigentes de otras naciones. Bien sea en una rueda de prensa o vía Twitter, las pruebas de sus amenazas están allí.
En julio de este año se pudo leer en su cuenta Twitter un mensaje que dirigió directamente al presidente iraní, Hasan Rohani: «Nunca más vuelva a amenazar a Estados Unidos o sufrirá consecuencias como muy pocos a lo largo de la historia han sufrido antes».
«Ya no somos un país que soportará sus palabras dementes de violencia y muerte. ¡Tenga cuidado!», agregó Trump, mientras las reacciones no se hicieron esperar por su contraparte.
Un poco más al sur del planeta, su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, quien lo valora como “el nuevo Hitler de la política internacional”, ha denunciado en más de una ocasión las amenazas implícitas y explícitas de Trump.
«Donald Trump hoy ha amenazado de muerte al presidente de la República Bolivariana de Venezuela», dijo Maduro ante cientos de partidarios tras una marcha antiimperialista en Caracas, en septiembre de este año, cita El Nuevo Diario en su portal web.
Como presidente de EE. UU. adora hacer lo que se le antoja y cambia las reglas del juego toda vez que puede, sin que nadie pueda responder a sus acciones o amenazarlo.
Si de amenazas de muerte implícita se trata, se puede mencionar el envío de tropas estadounidenses a la frontera de México, ylas advertencias a las llamadas «caravanas» de centroamericanos que intentan llegar al país del norte de América.
https://www.elciudadano.cl/politica/donald-trump-el-loco/04/16/
https://www.elciudadano.cl/estados-unidos/donald-trump-prohibe-transacciones-con-petro-venezolano/03/19/