El Registro Civil negó este martes una hora de matrimonio a una pareja gay con 19 años de relación formada por el periodista Ramón Gómez (43) y el diseñador gráfico Gonzalo Velásquez (37), argumentando la entidad estatal que tal unión está prohibida por la legislación chilena.
A raíz de ello, los afectados presentarán un recurso de protección con el patrocinio del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh). La pareja explicó que en la actualidad su principal motivación para contraer matrimonio es adoptar un niño o una niña.
«Estamos tristes y decepciones por la negativa de un órgano del Estado a reconocernos los mismos derechos que al resto de las personas. Era predecible, pero eso no quita la tristeza. Si la Corte Suprema falló en noviembre pasado que el matrimonio es un derecho humano, entonces es evidente que hoy se han violado nuestros derechos humanos», sostuvo Velásquez.
El afectado se refiere a la resolución del máximo tribunal que en noviembre pasado declaró al matrimonio como un derecho humano, luego de que el Registro Civil negara a una ciudadana dominicana casarse con un chileno porque no tenía sus papeles en regla. En ese sentido, el dirigente del Movilh, Rolando Jiménez, señaló que «tras la lamentable respuesta de hoy (martes), presentaremos esta semana un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones. De perder ahí, iremos hasta la Corte Suprema, la cual deberá ser coherente».
La pareja de Gonzalo Velásquez, Ramón Gómez, relató que entregaron a la funcionaria que los atendió en el Registro Civil el mencionado fallo de la Corte Suprema, así como un pronunciamiento de la Corte Interamericana de Derechos Humanos «donde se señala que el matrimonio igualitario está garantizado en la Convención Americana de Derechos Humanos, un instrumento ratificado por Chile». «Aún así, se nos negó el derecho a casarnos», añadió.
«Queremos que nuestro hijo o hija tenga los mismos derechos que otros y no que sea tratado como un niño o niña de segunda categoría, al impedirse jurídicamente el reconocimiento de su verdad, esto es que tendrá dos padres. Ningún niño o niña merece crecer y desarrollarse sobre la base de falsedades y desprotecciones jurídicas. Queremos entregar amor y afecto con la verdad y en igualdad derechos. Es la muestra máxima de amor», apuntó en tanto Velásquez.
La pareja destacó igualmente que consultaron en el mismo Registro Civil qué sucedería si un fallo de la Corte Suprema reconociera su derecho humano a casarse, respondiéndoles desde la entidad estatal que «en ese caso los hechos deberían ser analizados muy a fondo por su departamento jurídico». «Eso es lo que esperamos ocurra», sostuvieron los afectados.