Recuperación territorial campesina Mundo Nuevo cumplió un año de lucha contra la Forestal Arauco

Este domingo 27 de enero, la Recuperación Campesina Mundo Nuevo cumple 1 año desde el comienzo de su proceso de reocupación de sus tierras, el cual surge después de más de 40 años de ser expulsados de las mismas

Recuperación territorial campesina Mundo Nuevo cumplió un año de lucha contra la Forestal Arauco

Autor: Absalón Opazo

Este domingo 27 de enero, la Recuperación Campesina Mundo Nuevo cumple 1 año desde el comienzo de su proceso de reocupación de sus tierras, el cual surge después de más de 40 años de ser expulsados de las mismas.

Todo partió durante la dictadura, cuando fueron despojados por militares para, posteriormente, ver cómo la empresa Forestal Arauco se apropiaba del territorio en que vivían. Finalmente, en enero de 2018, decidieron recuperar sus tierras, cumpliéndose 1 año ya del comienzo de esa acción.

La recuperación territorial campesina Mundo Nuevo constituye un hecho histórico, al desafiar el poder de Forestal Arauco (Grupo Angelini) y otras empresas del rubro que cuentan con cerca del 80% de las tierras de la comuna de Curanilahue bajo su propiedad, en la provincia de Arauco, región del Biobío.

Junto con las recuperaciones territoriales mapuche, la recuperación campesina de Mundo Nuevo viene a plantear una alternativa de desarrollo para la Cordillera de Nahuelbuta en la provincia de Arauco, altamente intervenida y degradada por el monocultivo forestal.

Hasta el momento, los y las campesinas de Mundo Nuevo han instalado más de 20 casas en la Cordillera de la Costa de la comuna de Curanilahue, lugar que fue su hogar durante décadas antes de ser expulsados por Forestal Arauco y los militares. La comunidad campesina asegura contar con documentos que acreditan su propiedad sobre esta tierra, adquirida en el periodo histórico donde se desarrolló la reforma agraria en Chile.

La experiencia de la recuperación campesina de Mundo Nuevo es un hecho que llena de esperanza para reconstruir el tejido social y ambiental de un territorio altamente degradado por sucesivos periodos de monocultivo forestal. También trae la posibilidad que además del pueblo mapuche, sea el pueblo mestizo y campesino el que re-ocupe sus tierras, generando una alianza multicultural de recuperación territorial, a favor de una producción económica cooperativa de las comunidades en una mayor cercanía con los ciclos naturales.

Vía Resumen


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