La polémica decisión del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro de permitir la llegada de efectivos de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), para colaborar en labores de salvamento y rescate a los afectados por el colapso de una represa en el estado suroriental de Minas Gerais, genera desconfianza entre sectores políticos del país carioca.
Este domingo, Tel Aviv envió un grupo de 130 militares a Brasil “para ayudar en la búsqueda de los desaparecidos” en Brumadinho. Sin embargo, son muchos los que asumen que Bolsonaro ignorando el poderío de sus propias Fuerzas Armadas prefiere privilegiar las relaciones con el sionismo y traer soldados israelíes.
Colaboración o racismo
El exministro Aldo Rebelo, del partido Solidaridad, criticó la decisión de aceptar la ayuda del ejército israelí en la búsqueda de las víctimas del accidente con las presas en Brumadinho, tras negar la misma colaboración voluntaria de los cubanos que se ofrecieron para contribuir en el rescate.
«Bienvenida a la ayuda israelí en la tragedia de Brumadinho, pero al no aceptar el apoyo de los voluntarios cubanos, el gobierGo coloca el sectarismo ideológico por encima de las víctimas y del interés nacional«, criticó Aldo, en su cuenta en Twitter.
Los mismos reaccionarios que llamaron a los médicos cubanos de «espías» y «guerrilleros disfrazados» ahora aplaudiendo la llegada de militares de otro país a Brasil sin la menor reserva o sospecha. «Ahora bien, si los cubanos eran formados en medicina y espías, ¿qué decir de los israelíes, con entrenamiento militar?«, se pregunta el portal Socialista Morena.
Añade que los parlamentarios de la oposición tienen la obligación de verificar lo que estos militares extranjeros trajeron a Brasil y hacer un inventario de todo lo que entró en territorio nacional con los israelíes. Es necesario averiguar, por ejemplo, si trajeron armas, porque Israel es uno de los fabricantes de armas más grandes en el mundo.
Denigrar de las FF. AA.
Otros consideran preocupante el ver que las Fuerzas Armadas de Brasil quedan cuestionadas por esta decisión que puede traducirse como un ataque la soberanía. y una desconfianza en la capacidad técnica del cuerpo militar.
Según informes de prensa, fue sorprendente que el gobierno de Minas haya rechazado la ayuda militar del Ejército de Brasil que estaba disponible para el rescate, pero recibió con los brazos abiertos israelíes.
Evangelismo y sionismo
El presidente Bolsonaro y el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, están unidos por sus discursos, acciones y proyectos, pero también por la voluntad de su gran jefe, Estados Unidos.
En los primeros días de este año, Netanyahu estuvo en el país suramericano durante cinco días. En ese momento, Bolsonaro dijo que Netanyahu es un buen “aliado, amigo, hermano” y un “ejemplo de patriotismo, de abnegación y de trabajo por su pueblo”. El premier israelí, por su parte, se limitó a decir que solo le interesa el “mercado enorme” que representa Brasil.
Embajada en Tel Aviv
Bolsonaro a finales de diciembre de 2018 aseguró a Netanyahu que trasladará su embajada en Tel Aviv a Jerusalén, citaron los medios del gigante suramericano.
“Bolsonaro me dijo que era cuestión de cuándo, no de si la transfería o no”, con relación al posible traslado de la embajada brasileña en Israel, explicó Netanyahu en una reunión con líderes de la comunidad judía brasileña en Río de Janeiro (sur).
https://www.elciudadano.cl/brasil/bolsonaro-movera-su-embajada-a-jerusalen-capital-recien-nombrada-de-israel/12/31/
https://www.elciudadano.cl/brasil/bolsonaro-no-descarta-abrir-una-base-militar-estadounidense-en-brasil/01/04/
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