Diálogo propuesto por México y Uruguay, ¿la clave más sensata para la paz en Venezuela?

Uruguay y México fundamentan su postura con base en el respeto a la soberanía, la no injerencia en los asuntos externos y en la autodeterminación de los pueblos. Además, el esfuerzo de hacer esta reunión multilateral también busca dar paz, tranquilidad y normalidad a la población venezolana y al resto del continente

Diálogo propuesto por México y Uruguay, ¿la clave más sensata para la paz en Venezuela?

Autor: Ronald Ángel

El próximo jueves 7 de febrero se llevará a cabo una conferencia internacional que contará con la presencia de representantes de más de 10 países y organismos internacionales que buscan la mediación diplomática y el diálogo político para una solución pacífica a la actual amenaza de invasión militar por parte de tropas de Estados Unidos (EE.UU) que vive el pueblo de Venezuela.

Este encuentro internacional fue concretado gracias a la acción sensata de los gobiernos soberanos de México y Uruguay, que a través de sus cancillerías anunciaron la realización de esta conferencia para conseguir una mediación a la crisis política.

El Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, expresó estar de acuerdo con esta propuesta y de participar en un eventual diálogo con base en el respeto a la Constitución de la República Bolivariana.

Uruguay y México fundamentan su postura con base en el respeto a la soberanía, la no injerencia en los asuntos externos y en la autodeterminación de los pueblos. Además, el esfuerzo de hacer esta reunión multilateral también busca dar paz, tranquilidad y normalidad a la población venezolana y al resto del continente.

En ese sentido, el secretario general de la Organización para las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, quien también ha llamado al diálogo político entre gobierno y oposición para devolver la estabilidad al país y rechazar cualquier vía violenta que agrave la situación en Venezuela.

Al respecto, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) expresó este jueves durante una visita del presidente de España, Pedro Sánchez, que el diálogo siempre debe ser el primer paso y no la imposición, esto en referencia a la postura que ha asumido España y otros países alineados a EEUU, que insisten en reconocer al extremista de derecha Juan Guaidó como “presidente interino” del país y desconocer las elecciones en la que fue electo Nicolás Maduro como Presidente de Venezuela.

«Es diálogo como primer paso. No se pueden imponer las cosas. Primero se tienen que sentar a dialogar las partes. Y ya el diálogo, como lo dije, es un buen avance para el entendimiento», subrayó AMLO.

Esta posición de México también la asume Uruguay y su presidente Tabaré Vásquez, que de manera reiterada ha llamado a la resolución de los conflictos internos de Venezuela a través de la vía pacífica, del diálogo entre las partes y con base en el respeto a su soberanía, autodeterminación y lo que está consagrado en la Constitución Bolivariana.

El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, siempre ha llamado al diálogo político con la oposición para dar estabilidad al país y sobre todo paz

¡Cero diálogo! Violencia, arbitrariedad e imposición: la salida de la derecha contra Maduro

Pero la derecha venezolana y la internacional que obedece las líneas e intereses de EE.UU. rechaza el diálogo y prefiere mantenerse en salidas ilegales e inconstitucionales, donde se impone la injerencia y la intervención directa en los asuntos soberanos de Venezuela.

Así lo ratificó este jueves el presidente de España, Pedro Sánchez, tras su encuentro con AMLO, donde insistió en dar un ultimátum al gobierno del presidente Nicolás Maduro para que efectúe elecciones en los próximos días, un plazo que según él y los países pro Washington vence este fin de semana.

Esta misma posición arbitraria la tienen países del autodenominado Grupo de Lima, que conjuga a varios gobiernos latinoamericanos encabezados por empresarios neoliberales que son leales al magnate y jefe de la Casa Blanca, Donald Trump, entre ellos: Sebastián Piñera (Chile), Mauricio Macri (Argentina), Jai r Bolsonaro (Brasil), Iván Duque (Colombia), Lenín Moreno (Ecuador), entre otros.

Los presidentes de México y España -con posturas diferentes- durante sus declaraciones sobre Venezuela

Pero el proceso de aislamiento contra Venezuela lo encabeza a todo dar EEUU y eso se evidenció con mayor notoriedad el pasado lunes cuando el gobierno estadounidense impuso sanciones contra el país suramericano que van desde el congelamiento de 7.000 millones de dólares en activos de la compañía estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) hasta medidas restrictivas contra individuos y entes públicos relacionados con el gobierno venezolano.

De hecho este jueves el parlamento europeo votó en mayoría y en subordinación a Washington para reconocer como “presidente legítimo” a Guaidó, informó el jefe de esa institución, el italiano Antonio Tajani citado por la agencia Sputnik.

En ese contexto, el jefe de estado venezolano, Nicolás Maduro, recalcó que no aceptará bajo ningún concepto «el ultimátum de nadie en el mundo, ni el chantaje», por lo que aseguró que si EE.UU. y la Unión Europea quieren elecciones presidenciales, tendrán que esperar hasta el 2025, tal y como lo estipula la Constitución Bolivariana, o un referendo revocatorio cuando se cumpla la mitad de su mandato.

La crisis política en Venezuela se radicalizó luego que la derecha venezolana diera una patada a la mesa de diálogo en República Dominicana, cuando ya las partes estaban a punto de firmar un acuerdo

Mediación y diálogo para procurar la paz y frenar los vientos de guerra

Para Élodie Brun, experta en relaciones internacionales del Colegio de México (Colmex) y citada por RT, la derecha venezolana e internacional está buscando por cualquier vía cambiar el poder político en Venezuela.

«Hay una tentativa en la oposición de cambiar el equilibrio de fuerzas en Venezuela, buscando apoyos internacionales, vía la autoproclamación de Guaidó, y mediante las sanciones desde EE.UU.», dijo Brun.

Para Brun, si México y Uruguay quieren ser mediadores tendrán que buscar apoyos regionales de varios campos y en ese sentido, el reciente anuncio de la conferencia en Montevideo podría apuntar en esa dirección.

Pero la internacionalista mexicana indica a RT, que el escenario de diálogo entre las partes aún es difícil, sobre todo con la radicalización de las partes involucradas en el ámbito internacional, como las fuerzas pro estadounidenses y las patriotas que apoyan la soberanía y autodeterminación venezolana.

EE.UU. ha incentivado la crisis política en Venezuela y amenaza con ejecutar una invasión militar que provocaría una guerra sin precedentes en la región

«Hay una ventana de oportunidad para evitar que haya un desenlace violento», indica Brun a pesar de reconocer que es difícil en un contexto tan inestable.

Por su parte, Diego Hernández Nilson, académico uruguayo, considera que será clave la decisión tomada por la Unión Europea para adelantar el proceso de negociación y diálogo en Venezuela.

«Más allá de lo que suceda, lo que a uno le interesaría realmente es que no se lleve al extremo de una invasión con intervención militar. Es el mayor temor que tenemos en Uruguay», explica Hernández Nilson citado por RT.

En ese sentido agrega el catedrático que «Uruguay siempre ha intentado tener un rol de mediador, de facilitar la resolución de conflictos a través del derecho internacional” y un reciente ejemplo ha sido el rol que tuvo como garante del diálogo entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Gobierno de Juan Manuel Santos (2010-2018).

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