El fallecimiento de Abel Reyes Clemente es el cuarto de un migrante, que ocurre bajo la custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas en tan solo 7 meses.
Esta semana, otro migrante de origen mexicano murió en extrañas circunstancias en uno de los centros de detención del Servicio de Inmigración y control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés).
Abel Reyes Clemente, de 54 años de edad, falleció el miércoles en el Centro de Procesamiento de Florence, a 105 kilómetros al sureste de Phoenix, Arizona, después de que los servicios médicos de la agencia no pudieron mantenerlo con vida, informó ICE en un comunicado difundido este viernes.
We are heartbroken to learn of the death of Abel Reyes-Clemente in the custody of ICE at the Florence Service Processing Center on Wednesday, 4/3. While the cause of Mr. Reyes-Clemente’s death has not been determined, everyone has the right to prompt, high quality medical care.
— Florence Immigrant & Refugee Rights Project (@FlorenceProject) April 5, 2019
Según la agencia, el pasado 1 de abril, Reyes Clemente había sido puesto en observación por personal médico de Centro de Procesamiento después de presentar síntomas de la influenza.
El miércoles, el personal del centro de detenciones se percató de que el migrante no respondía y no respiraba, y le proporcionaron los primeros auxilios y contactaron a paramédicos del Centro Médico Mountain Vista (MVMC), pero no pudieron mantenerlo con viday registraron su fallecimiento el miércoles a las 06:33 horas (hora local).
Según las regulaciones establecidas, se practicará una autopsia del cuerpo para determinar la causa de la muerte.
El mexicano había sido puesto bajo custodia del servicio de migración después de ser liberado de la cárcel del Condado Maricopa, en Arizona, el pasado 26 de febrero, donde había cumplido una sentencia por un delito menor: manejar un vehículo bajo la influencia del alcohol.
Migrantes fallecidos
El caso de Reyes Clemente es el cuarto fallecimiento de un migrante bajo custodia de las autoridades que se registra en los últimos 7 meses.
El pasado 18 de febrero, un migrante mexicano de 45 años que había sido arrestado por la Patrulla Fronteriza por reingresar ilegalmente a EE.UU. murió en un hospital de Texas.
En diciembre de 2018, Jakelin Caal Maquín, una niña guatemalteca de siete años falleció horas después de quedar bajo custodia de las fuerzas estadounidenses, luego de haber cruzado ilegalmente la frontera desde México junto a su padre.
Mientras que un segundo menor, de ocho años, y también de origen guatemalteco, murió en un hospital de Nuevo México el 24 de diciembre, tras haber estado bajo la custodia de la policía fronteriza durante más de una semana.
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