Miles de originarios brasileños instalaron este miércoles en Brasilia su tradicional “Campamento Tierra Libre”, enfocado este año en la denuncia de la expansión de las actividades mineras y agropecuarias favorecidas por el presidente de ultraderecha Jair Bolsonaro
Miles de indígenas brasileños instalaron este miércoles en Brasilia su tradicional “Campamento Tierra Libre”,donde se denunciaron ante el mundo su rechazo por las concesiones mineras y permisos de tala en territorios de propiedad de los pueblos ancestrales del amazonas, otorgadas por el gobierno de Jair Bolsonaro.
A pesar de la tensión política y de la presencia de decenas de patrullas y efectivos de seguridad alrededor del campamento, los manifestantes iniciaron sus actividades bailando y cantando para pedir fuerza e invocar protección.
“Nuestras tierras son sagradas. No a la minería en tierras indígenas”, proclamaba una pancarta instalada frente al edificio del Congreso. “Nuestros derechos no se negocian”, se leía en otro cartel.
“Vinimos aquí por una causa importante. Fue muy difícil para nosotros y nuestros antepasados conquistar estos derechos y poco a poco están disminuyendo. Vinimos a pedir más respeto”, dijo Camila Silveiro, de 22 años, una estudiante de secundaria de la etnia Kaingang, en el estado de Paraná (sur), refiere la agencia AFP.
Rechazan las declaraciones del gobierno de Bolsonaro en contra nuevas demarcaciones de tierras indígenas y a favor de la expansión de actividades económicas cuestionadas por los pueblos originarios y defensores del medio ambiente en la Amazonía .
“Tenemos la mayor riqueza del mundo, que es nuestra floresta, nuestro río (…). El día en que se acabe la población indígena y se derribe el último árbol, se acabará el país. Y no solo nuestro pueblo, también se acabará el mundo”, dijo por la tarde en una rueda de prensa en una tienda el cacique guaraní Dará.
Derecho indígena
Según cifras oficiales, unos 800.000 indígenas de 305 etnias viven en Brasil, un país de 209 millones de habitantes.
La Constitución brasileña determina que esos pueblos tienen el derecho al usufructo exclusivo sobre las tierras que ocupan, pero la demarcación se ve amenazada por la tala ilegal, la expansión de la ganadería y el avance de la frontera agrícola.
Poco después de su elección, Bolsonaro apuntó a la continuidad de esa política. “¿Por qué mantener a los indígenas aislados en reservas, como los animales en un zoológico?”, si “como nosotros quieren evolucionar, quieren tener médicos, dentistas, acceso a internet, viajar en avión”, declaró.
Tierra, salud y educación
El Campamento Tierra Libre, realizado anualmente desde 2004, permanecerá en la ciudad hasta mañana viernes y servirá de espacio de encuentro para los líderes de las decenas de comunidades indígenas en Brasil y para la exposición de sus demandas, centradas en el derecho a la tierra, la salud y la educación.
“Desde el 1 de enero, el gobierno atacó a los indígenas en todos sus derechos, uno de ellos la educación”, dijo a la AFP Luana Kumaruara, de 33 años, nativa de Pará (norte), que cursa una maestría en antropología.
Recordó que el primer ministro de Educación de Bolsonaro, Ricardo Vélez (destituido este mes), llegó a afirmar que la universidad no era para todos, lo cual afectaría el acceso a una educación superior de los indígenas, tradicionalmente con menos recursos.
Representantes indígenas participarán el jueves en una audiencia pública en la Cámara de Diputados y realizarán discusiones sobre mujeres y jóvenes de esos pueblos.
El viernes, realizarán rituales tradicionales y una marcha y aprobarán una “agenda de lucha“.
Con información de AFP
https://www.elciudadano.cl/pueblos/marcha-indigena-llega-a-brasilia-para-protestar-contra-bolsonaro/04/23/
https://www.elciudadano.cl/latino-america/brasil/survival-bolsonaro-declaro-la-guerra-a-los-indigenas-por-sus-territorios/02/14/