El Fondo Mundial para la Naturaleza, mejor conocido World Wildlife Fund o WWF ayudó al Marine Stewardship Council (MSC) de Reino Unido, a establecer un proceso que permite identificar fácilmente cuáles peces son capturados de manera responsable, como un método para luchar contra la sobrepesca.
Una práctica que representa una amenaza para nuestros océanos y que está llevando a algunas especies a la extinción, cambiando irreparablemente los ecosistemas.
Un nuevo informe difundido por la Comisión Europea indica que un 40 % de las poblaciones de peces del Atlántico y un 87 % del Mediterráneo se pescan de forma insostenible.
El estudio de 2019 del Comité Científico, Técnico y Económico de Pesca confirma que muchas poblaciones de peces se encuentran fuera de los límites de seguridad biológicos.
Adicionalmente, cerca de un tercio de las pesquerías en todo el mundo se encuentran sobreexplotadas, esto se traduce en mayor número de capturas al número de peces que nacen o eclosionan, lo que significa una disminución de la población, que difícilmente se recupera, hasta llegar a desparecer en lugares donde alguna vez fueron abundantes.
WWF trabaja para preservar y expandir las áreas marinas protegidas y colabora con los Gobiernos del mundo para combatir la pesca ilegal que está dañando a millones de animales marinos cada año y poniendo en peligro el bienestar de las personas cuyo alimento o trabajo dependen de los océanos.
La organización trabaja en comunidades locales para asegurar que aquellos quienes dependen de los peces tengan un suministro constante de alimentos a largo plazo. Y con la ayuda de líderes de la industria, científicos y pescadores, aplican nuevas prácticas y herramientas para reducir la captura incidental.
Una muerte que entra en las estadísticas
Es incontable la cifra de especies que no son objeto de la pesca, pero quedan atrapadaos en las redes accidentalmente cada año, incluyendo tiburones, tortugas, aves marinas y más.
Incluso es la principal causa de muerte para pequeños delfines, marsopas y ballenas pequeñas, de las cuales se pierden más de 300 mil, debido a la captura incidental cada año.
Cuando los peces empiecen a desaparecer, las personas que dependan de la pesca para subsistir tendrán que cambiar su forma de vida por completo, o afrontar situaciones de desnutrición.
Según WWF, “juntos podemos acabar con la sobrepesca, manteniendo nuestros océanos saludables y equilibrados para el futuro”.
Ecosistemas alterados
Atrapar un número ilimitado de peces puede romper de manera violenta la cadena alimenticia y tener múltiples efectos. Algunas especies pueden disminuir ante la pérdida de su fuente alimenticia y otras pueden multiplicarse sin control, por ejemplo: la sobrepesca de atún rojo puede ser una de las razones por las que estén aumentando las poblaciones de calamar, al igual que podría estar contribuyendo a la intoxicante proliferación de algas.
El MSC es una organización mundial independiente sin fines de lucro, con sede en Londres, que establece un estándar para la pesca sostenible, mediante un programa de certificación y ecoetiquetado para la pesca salvaje.
Su misión es contribuir a la salud de los océanos de todo el mundo, reconociendo y recompensando las prácticas de pesca sostenibles, y de esta manera influir en las elecciones del consumidor cuando compra alimentos marinos, para transformar el mercado de productos pesqueros de manera sostenible.
https://www.elciudadano.cl/alimentacion/onu-el-mediterraneo-es-el-mar-con-mas-sobrepesca-del-mundo/07/09/
https://www.elciudadano.cl/medio-ambiente/difunden-antecedentes-del-origen-probable-de-la-contaminacion-en-el-rio-bueno/04/26/