La Confederación General del Trabajo (CGT) de Argentina anunció un paro general de 24 horas contra el Gobierno del presidente Mauricio Macri, el próximo miércoles 29 de mayo.
Se trata de una protesta masiva para oponerse a la mala situación económica y social del país sudamericano, a tres años y medio de la gestión del mandatario de derecha.
El anuncio lo hizo uno de los secretarios generales de la CGT, Héctor Daer, quien precisó que esta es “una medida de acción directa” contra Macri y se convoca «por solidaridad” con lo que está sucediendo en el país.
«Esto es, ni más ni menos, en reclamo a que se modifique el aceleramiento de la decadencia de la economía de nuestros compañeros, de nuestros hogares», dijo en rueda de prensa.
La crisis que afecta al país sudamericano ha tocado a todos los sectores y «en este momento no hay sector que se salve», por lo que los dirigentes afirman priorizar los intereses de la patria antes que permitir que continúe la depreciación de su moneda y la merma de su capacidad de poder adquisitivo.
De mayo 2018 a la fecha, Macri ha enfrentado una serie de protestas y aun así “recortó los subsidios para la electricidad, el combustible y el transporte, lo que ha generado que los precios se disparen”, asevera un trabajo especial del diario estadounidense The New York Times.
En la publicación se comenta de manera acertada que el problema con la llegada de Macri al poder “es que los argentinos todavía no han experimentado lo que el mandatario prometió: la reactivación económica que supuestamente ocurriría después de los dolorosos recortes”.
Carlos Acuña, otro secretario general de la central obrera, explica que esta convocatoria «no tiene nada que ver con la división en el movimiento obrero, ni con lo político, tiene que ver con lo que nos pasa a todos los argentinos».
Héctor Daer, por su parte, señaló que la medida de fuerza tiene como objetivo que «se modifique la decadencia de la economía» que sufren los hogares argentinos.
En 2018, el Gobierno argentino acudió al Fondo Monetario Internacional (FMI) para obtener un crédito de 56.300 millones de dólares, el mayor que ha concedido el organismo en toda su historia, reseña el portal ruso Spuntnik.
En respuesta a una posible reunión con el FMI, los sindicalistas prefirieron plantear al organismo financiero que tome en cuenta que “es insostenible este nivel de endeudamiento, inflación y ajuste permanente».
Indicaron además que el paro tiene como objetivo reclamar un cambio de rumbo económico «para la dignidad de los trabajadores».
Los dirigentes descartaron cualquier posibilidad de que el paro de 24 horas sea desactivado a partir de una mesa de negociación con la Casa Rosada.
«No empecemos con que se discute: el 29 hay paro», sentenció Daer, citado en el diario Página 12.
De acuerdo con lo publicado por el medio, sí queda abierta una posibilidad de “un debate que conforme una estructura política no solo para garantizar la posibilidad de ganar las elecciones, sino para gobernar».
Héctor Daer sostiene que la huelga es una medida inversa a lo que está pasando ahora en Argentina: “es para pelear por las medidas que toma este Gobierno, que no vio los miles y miles de trabajadores que estuvieron el 4 de abril, una gran movilización en donde participaron centenares de trabajadores bajo la lluvia».
Con un paquete de reformas neoliberales y desaciertos durante su gestión, Macri buscará la reelección mientras Argentina debe realizar un ajuste en la política económica, monetaria y fiscal, que este año llevará a equilibrar el déficit fiscal primario, que vale decir, no cuenta los intereses de deuda adquirida con el FMI.
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