Según los medios, el infante de dos años y medio falleció en un hospital de Texas, donde recibía tratamiento para la neumonía
Un niño migrante de Guatemala, de dos años y medio, murió este martes en el hospital donde recibía tratamiento para la neumonía que desarrolló después de cruzar ilegalmente la frontera estadounidense junto con su madre cerca de El Paso, Texas, el 3 de abril y ser detenido por la Patrulla Fronteriza de EE.UU.
Durante tres días de detención el estado del niño, que presentaba problemas de salud, empeoró, y el 6 de abril la madre alertó a las autoridades migratorias, detallan medios locales que han hablado bajo condiciones de anonimato con un funcionario al tanto del caso.
El menor fue hospitalizado el mismo día en Horizon City y al día siguiente lo trasladaron a un hospital infantil en El Paso, indica The Washington Post.
El 8 de abril, mientras el niño seguía recibiendo tratamiento en el hospital, las autoridades federales oficialmente liberaron a la familia de la custodia de la Patrulla Fronteriza, decretando que tenían que comparecer luego ante un tribunal de inmigración.
Se desconoce cuándo exactamente se enfermó el niño y si ya había ingresado al territorio estadounidense con problemas de salud. Tekandi Paniagua, cónsul de Guatemala en Del Río (Texas), comentó que el pequeño tenía fiebre elevada y dificultades para respirar y apuntó a las condiciones de su viaje rumbo a EE.UU. como causa. La portavoz del Ministerio de Exteriores de Guatemala, Marta Larra, indicó, citada por Reuters, que la enfermedad comenzó como una infección de gripe y empeoró gradualmente.
El menor sería el cuarto niño migrante que muere desde diciembre pasado tras ser detenido en la frontera con México y trasladado a un hospital.
La niña Jakelin Caal de siete años murió el 8 de diciembre en un hospital de la ciudad de El Paso (Texas, sureste) tras sentirse mal el día anterior en un centro de detención de migrantes.
El menor Felipe Gómez, de ocho años, falleció el 24 de diciembre luego de que médicos de un hospital le diagnosticaran gripe y le dieran de alta.
El 30 de abril un adolescente guatemalteco de 16 años murió en el centro hospitalario de Texas a donde había sido ingresado con fiebre, escalofríos y dolor de cabeza.
La muerte de los niños y las condiciones en que son retenidos los migrantes han sido fuertemente criticadas por organizaciones de derechos humanos y organismos internacionales, pero el Gobierno estadounidense afirma que sus medidas no violan los derechos humanos.
Con información de RT y Sputnik
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