Este lunes, a través de una declaración pública, la Asociación de Funcionarios de Servicios Centrales de la Universidad de Chile (AFUCHSCEN) -que agrupa a casi 800 trabajadores de distintas unidades de la institución, incluida su Casa Central- rechazaron la violencia ejercida por Carabineros contra los estudiantes del Instituto Nacional, y emplazaron al municipio de Santiago a buscar una salida negociada con los jóvenes a la crisis del establecimiento.
En el documento los funcionarios sostiene que «las imágenes de niños siendo golpeados por integrantes de Fuerzas Especiales se han transformado en una postal permanente del sector de Alameda con Arturo Prat, en medio de un conflicto en donde queda claro que la violencia no es la respuesta para solucionar el problema de fondo».
En ese sentido, los trabajadores -testigos de la represión ejercida contra sus «vecinos» del Instituto Nacional en el centro de Santiago- añaden que «las altas cantidades de gases lacrimógenos que se utilizan para disolver las manifestaciones afectan a todo el sector,incluidos quienes desempeñan sus labores en las dependencias de la Universidad de Chile, haciendo por momentos irrespirables las oficinas».
La Asociación señala que creen que lo que ocurre hoy en el Instituto Nacional «es expresión de una crisis más profunda de la Educación Pública en su conjunto, de la cual el Estado es el principal responsable».
En este contexto emplazan a la Municipalidad de Santiago, como representante del Estado en la comuna y sostenedor del Instituto Nacional, a «establecer los espacios de diálogo necesarios con los estudiantes y autoridades académicas, para solucionar este conflicto».
En esa misma línea, realizan un llamado a Carabineros y a las autoridades políticas a «detener la violencia desatada contra los estudiantes». «La violencia no puede ser la respuesta a quienes denuncian el abandono de la educación pública», concluyen los trabajadores.