Confusión es lo que ha generado el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en torno al acuerdo migratorio alcanzado el pasado viernes con México para evitar la imposición de aranceles con la que el mandatario estadounidense amenazó a la administración de Andrés Manuel López Obrador.
El sábado, cuando aún no se conocían más detalles del pacto, Trump anunció en Twitter que México acordó «comenzar a comprar inmediatamente grandes cantidades de productos agrícolas de nuestros grandes agricultores”.
Sin embargo, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, desmintió esa aseveración del mandatario estadounidense durante la conferencia matutina de este lunes en Palacio Nacional, en la que explicó en detalle el acuerdo, reseñó el portal Animal Político.
“Separamos lo económico de lo migratorio. Fuera de lo que acabo de explicar no hay ningún acuerdo. Es un acuerdo migratorio, no comercial”, aclaró Ebrard.
Sin embargo, este lunes Trump continuó apostando a la discordia y la intriga al asegurar que el pacto del viernes incluye elementos secretos que aún no se han anunciado, refirió EFE.
«Tenemos un acuerdo sobre algo que anunciaremos muy pronto. Está todo hecho. Está todo hecho debido a los aranceles y la relación con México», manifestó Trump en declaraciones a la prensa en la Casa Blanca.
Asimismo, aprovechó para reiterar sus amenazas a la administración mexicana. «No anticipamos ―continuó― un problema con el voto, pero si por alguna razón la aprobación no llega, los aranceles se restablecerán», acotó.
La disputa con México arrancó el pasado 31 de mayo cuando el mandatario estadounidense anunció la imposición de las tasas para «presionar» a la administración mexicana a que «frene» la migración ilegal.
El miércoles de esta semana comenzaron una serie de reuniones en Washington, lugar al que viajó la delegación mexicana para jugarse sus últimas cartas.
El viernes se logró el acuerdo después de horas de negociación. México se comprometió a reforzar sus controles de seguridad en la frontera sur para reducir la migración irregular y desmantelar las organizaciones de tráfico y contrabando de personas, para que Estados Unidos no le aplicara aranceles comerciales.