La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación Superior Chilena (Conatuch) denunció que el nuevo ministro de Relaciones Exteriores, Teodoro Ribera, tuvo un «actuar antisindical» mientras ejercía la rectoría de la Universidad Autónoma.
El actual canciller, que concluyó su segundo periodo a la cabeza del plantel antes del último cambio de gabinete, ya había sido acusado de ofrecer sobornos para facilitar la acreditación de la institución en 2011, cuando era titular de Justicia del primer gobierno de Sebastián Piñera.
Ahora, la denuncia de los trabajadores surge por una supuesta obstrucción de Ribera al proceso de negociación colectiva a cargo del recién creado sindicato. Según explicaron los funcionarios en un comunicado, «la adscripción de la U. Autónoma al beneficio de la gratuidad «significó alrededor de $42.328.089.000 de financiamiento para el año 2017, que constituye a su vez un 55,6 por ciento del total de su presupuesto para ese año».
«Esto permitió que la Universidad, en el proceso de negociación colectiva iniciado por el Sindicato, aplicara el artículo 304 del Código del Trabajo, conforme al cual se restringe la negociación colectiva en aquellas empresas cuyos presupuestos en cualquiera de los últimos dos años hayan superado el 50 por ciento de financiamiento estatal», situación que para la Conatuch constituye un «bloqueo al proceso».
Esto, pues la maniobra logró desincentivar «uno de los principales fines» del sindicato, y eventualmente impidió que este consiguiera el quórum de 160 para consolidarse, y esté ad portas de perder su personalidad jurídica el próximo 21 de junio. El documento agrega que luego de estos eventos, la única dirigenta del sindicato, Tatiana Núñez, «perderá también su fuero legal, quedando expuesta a posibles represalias».
De esta forma, se estaría eliminando «por completo el rastro de alguna organización de trabajadores en la Universidad Autónoma, todo esto precisamente durante la rectoría del actual canciller». En este punto, desde la Conatuch enfatizan que «el actuar antisindical del ex rector no puede pasar desapercibido», en vista de que el beneficio «justamente logrado» de la gratuidad «está afectando la existencia de organizaciones sindicales en las instituciones de educación superior, y con ello el derecho fundamental de la Libertad Sindical».
El comunicado concluye resaltando un rechazo al nombramiento de Ribera como canciller, pues estiman que «en el marco de las relaciones laborales internacionales al alero de la Organización Internacional del Trabajo, no le preocupará la situación de los trabajadores de otro países de la región, sino que únicamente estrechará lazos con las grandes multinacionales».