Alekei – Fulgor (2019 – independiente)
Cuando el impulso creativo de alguien se convierte en objeto y éste comienza a abrirse camino es preciso tomarle atención y tratar de encontrar cuál es la magia que está provocando esa comezón. Es por eso que siempre aparecen ciertos resplandores entre tanta música que toma y re – versiona diversos estilos, marcando una pauta ya conocida y en búsqueda del éxito rápido y el reconocimiento desechable. En este caso ocurre lo contrario y eso es lo que uno valora a la hora de escuchar y analizar los discos que están apareciendo en estos alocados días.
“Fulgor” es un EP que brotó desde las creaciones de Alekei, alter ego de Alex Bay, un joven profesor de lenguaje y comunicación, poeta, padre y músico chilote radicado en Santiago. En el EP, se deja notar muy claramente todas las influencias que convergen en el universo musical del musicompositor (como él mismo se denomina), donde podemos encontrarnos con la tradición chilena en sones folklóricos, lo sinfónico en algunos arreglos y la experimentación en un pequeño espacio de tiempo, una fracción de realidad que te deja tarareando, pegado con algunas de las canciones que acá suenan.
Algo interesante de “Fulgor” es que es variado, las canciones no se parecen entre sí, a pesar de poseer 2 boleros, ambos se pasean por distintos paisajes, mientras que las otras secciones varían entre el pop, el rock y la trova. Sin embargo, en “Los horarios” y “Ruda Tempestad” se muestra el lado más creativo de Alekei, donde no existe el parámetro que te dan los estilos más conocidos, acá la libre creación queda de manifiesto con interesantes arreglos que acercan estos temas más a la fusión y lo alejan de la senda del trovador. En este caso, destacable e importante (separando música y letras) es la poesía que desborda en cada una de las 6 creaciones sonoras: letras que hablan de amor, de la pasión, del nacimiento de un nuevo ser, de cómo uno puede volver a reconstruirse, la evasión de la rutina, la tristeza en las relaciones humanas y la alienación cívica. En resumen, una visión de la vida actual en la urbe que día a día te deshumaniza y provoca que las conexiones con otros seres se diluyan y desaparezcan, causando éste sentimiento de hastío, pero uno con esperanzas en que la luz llegará de un momento a otro y es eso lo que te mantiene en pie al final del día.
“Fulgor” le hace honor a su nombre y tiene un brillo propio que hace que la estela de esa luminosidad se mantenga en tu cabeza la mayor parte del día y te darás cuenta de eso cuando, sin querer, te sorprendas tarareando alguna de sus melodías.
Pase y disfrute.