El Tribunal Supremo de Justicia de Navarra, España, aumentó la condena de 9 a 15 años a los cinco miembros de «La Manada», al considerarlos culpables de un delito continuado de violación, en lugar de abuso sexual.
De esta manera, queda revocada la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra en contra de José Ángel Prenda, Antonio Manuel Guerrero, Jesús Escudero, Ángel Pozas y Alfonso Jesús Cabezuelo, quienes se encontraban en libertad condicional desde el 22 de junio de 2018, luego de pagar una fianza de 6.000 euros.
El Alto Tribunal respondió a la petición de la Fiscalía, la víctima y las acusaciones populares. Consideró que las «relaciones sexuales» se produjeron en «un auténtico ambiente intimidatorio», por lo que se trata de una violación y no de un abuso.
El fallo que impone 15 años de prisión es por agresión sexual continuada con el agravante de trato vejatorio y actuación en grupo.
Además, los sentenciados deben pagar una indemnización a la víctima de 100.000 euros. Habrá una orden de alejamiento de la víctima por un período de 20 años. Tras cumplir su condena, tendrán otros ocho años de libertad vigilada.
«La Manada» tras las rejas
A solicitud de la Audiencia de Navarra, se ejecutó la detención, casi de inmediato, de los cinco delincuentes. Según una información publicada por El País, algunos de ellos tenían planificado salir de Sevilla.
Cuatro de ellos fueron capturados a su salida del Tribunal Supremo, donde debían firmar los lunes, miércoles y viernes como parte de las condiciones de su libertad condicional. El quinto integrante, se entregó a la policía al final de la tarde.
Se conoció que los sujetos fueron trasladados hasta el centro penitenciario Sevilla, en Mairena del Alcor, donde deberán cumplir su condena.
«La Manada»: Triste referencia de violación grupal
El 7 de julio de 2016 un grupo de cinco sujetos violó a una joven de 18 años en la localidad de Pamplona, en Sevilla, España, durante la celebración de las fiestas de San Fermín.
El lamentable crimen tuvo una gran cobertura mediática debido a la difusión de los videos de cuando cometían la violación. Los cinco agresores pertenecían a un grupo de WhatsApp llamado «La Manada» y por eso los medios de comunicación llamaron de ese modo el caso.
Los cinco nacieron entre los años 1988 y 1991 y entre ellos se encontraban un guardia civil y un militar miembro de la Unidad Militar de Emergencias.
El hecho generó el rechazo colectivo y originó que surgieran otras denuncias relacionadas con vioalciones grupales en varias partes del mundo.
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