Proteger el medio ambiente es el principal objetivo del proyecto de ley que se discute actualmente en el Senado, y que modifica la ley N° 21.100 a fin de prohibir la entrega y venta de artefactos plásticos, tales como platos, vasos y cubiertos, además de terminar con la venta de productos contenidos en envases o botellas que sean de material plástico u otro material de difícil biodegradación.
La moción, que ahora será estudiada por la Comisión de Medio Ambiente y Bienes Nacionales, fue presentada por los senadores Manuel José Ossandón, Carmen Gloria Aravena, Ximena Órdenes y Rafael Prohens. Los legisladores proponen como sanción por el incumplimiento de las prohibiciones propuestas, las establecidas en la disposición que prohíbe el uso de bolsas plásticas; esto es, con multa a beneficio municipal de casi $250.000 mensuales por cada bolsa plástica de comercio entregada (5UTM).
“De esta forma se busca que la Ley número 21.100 vaya convirtiéndose, a través del tiempo, en un verdadero «código» de la protección ambiental, específicamente, en lo relativo a la generación de basura de material plástico”, destacan los autores.
Con todo, agregan, se busca ampliar el objetivo de la mencionada ley “en el sentido de que para proteger el medio ambiente ya no solo se prohíbe la entrega de bolsas plásticas en el comercio, sino que también se incorpora un nuevo artículo para prohibir la venta o entrega de artefactos tales como platos, vasos y cubiertos de material plástico que tengan por vida útil un solo uso o un número reducido de usos”.
“Adicionalmente, se agrega un nuevo relativo a la prohibición de venta de productos contenidos en envases o botellas que sean de material plástico u otro material de difícil biodegradación (…), que tienen una vida útil muy limitada y que perfectamente podrían ser reemplazados por botellas o envases de otro material reutilizable o de fácil biodegradación que disminuya sustancialmente el daño producido al planeta” detallan.
En el mismo sentido, los legisladores precisan que “las miles de toneladas de basura plástica que hoy están flotando en los océanos, ríos y lagos o están depositadas en la tierra han generado un gran daño ambiental a nuestro planeta, tanto a los animales como a biosfera en general, lo cual nos hace replanteamos como sociedad respecto de nuestro estilo de vida y, más concretamente, de tomar consciencia de la necesidad de hacer cambios urgentes respecto de ciertos hábitos de consumo, ya que ha sido el ser humano el principal causante de la contaminación que afecta al planeta tierra”.
Además, argumentan que distintas fuentes sobre la generación de basura plástica muestran la gravedad de la situación, calculándose que entre el 15% y el 40% del plástico producido en el mundo acaba cada año en los mares.
“La peligrosidad de la basura plástica en los océanos no solo afecta directamente a los animales que viven en él, sino que también a los seres humanos que consumen alimentos del mar como pescados o mariscos”, indican.
Para los autores “surge la imperiosa necesidad de fomentar el reciclaje y reutilización de materiales ya utilizados, de manera de que se genere un «sistema» de protección al medio ambiente”.
Fuente: Senado