Antes de cumplirle el sueño americano a su hijo, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, tendrá que explicar a un juez la posible designación de Eduardo Bolsonaro como embajador de la nación sudamericana ante Estados Unidos.
Este miércoles, el juez André Jackson de Holanda Maurício Júnior, substituto del magistrado a cargo del primer tribunal Federal Civil de Bahía, dio un plazo de cinco días al mandatario para que se pronuncie sobre el caso.
La propuesta de designar como representante diplomático a Eduardo, tercer hijo y diputado federal, la presentó Bolsonaro a principios de julio.
Para emitir esta decisión, el magistrado tomó en cuenta la acción popular que presentó el diputado del Partido de los Trabajadores (PT), Jorge Solla, en la que pidió a la justicia que determine la «inmediata inhibición del acto de indicación de Eduardo Bolsonaro, por su padre, presidente de la República, para ejercer el cargo de jefe de misión diplomática en los Estados Unidos de América», reseñó EFE.
Según Solla, la designación de Eduardo «violaría todos los mandatos constitucionales referentes a lo impersonal y a la moralidad».
«Es una cosa que tengo en mi radar, sí, y existe esa posibilidad. Es amigo de los hijos de Donald Trump, habla inglés y español, tiene una vivencia muy amplia del mundo. Podría ser la persona adecuada y realizar el trabajo perfectamente», fueron los argumentos que esgrimió Bolsonaro cuando habló sobre el nombramiento.
«No quiero anticipar el futuro, la legislación dice que tiene que renunciar a su escaño. Me quedé pensando: ¿Imagine si estuviese en Brasil el hijo del presidente Mauricio Macri como embajador de Argentina? Obviamente que el trato sería diferente al de un embajador normal», acotó.
Antes de que el mandatario lo dijera públicamente, se filtró la información y se generó una ola de críticas no solo por parte de la oposición, sino también de diplomáticos y altos funcionarios del país. El juez Marco Aurélio Mello, del Supremo Tribunal Federal, aseguró que la decisión era un «pésimo ejemplo» y podía ser calificada de «nepotismo», refirió el portal Actualidad RT.
Quien se mostró feliz con la posibilidad fue el presidente de EE. UU., Donald Trump, pues aseguró que Eduardo «es excepcional, es un joven brillante y maravilloso».
«Estoy muy contento con este nombramiento. Conozco a su hijo… No creo que sea nepotismo, porque su hijo lo ayudó mucho en la campaña», dijo a los periodistas.