En el estado de Oregón (EE. UU.) detectaron un virus capaz de provocar graves afecciones en los seres humanos, desde daños cerebrales y secuelas neurológica, hasta la muerte.
El Departamento de Salud del estado de Florida advirtió recientemente sobre la presencia, en el área del condado de Orange, del virus responsable de la encefalitis equina del este (EEEV, por sus siglas en inglés), una peligrosa y rara enfermedad trasmitida por mosquitos.
Las autoridades sanitarias aseguran que varios pollos centinelas —utilizados para monitorear y rastrear enfermedades infecciosas— de una misma parvada dieron positivo en EEEV. Este resultado ha “aumentado” el riesgo de trasmisión en humanos, subraya el citado departamento de salud.
La dolencia se produce por un arbovirus —virus trasmitidos por artrópodos— y, aunque rara vez afecta al hombre, puede provocar síntomas gripales como fiebre, dolor de cabeza, malestar general, dolor muscular y óseo. No obstante, cerca de un 5 % de los infectados podría experimentar complicaciones más graves que van desde daño cerebral, convulsiones y secuelas neurológicas, hasta la muerte (en un tercio de las víctimas), recogió el portal Gizmodo.
La principal fuente de contagio son mosquitos de varias especies que habitan, por lo general, en zonas pantanosas o boscosas y con baja población humana.
Recomendaciones sanitarias
- Drenar botes de basura, macetas o cualquier recipiente que pueda acumular agua de riego o lluvia
- Vaciar y limpiar con regularidad los bebederos de aves y otras mascotas
- Mantener las piscinas en buen estado y adecuadamente cloradas
- Usar repelente sobre la piel y la ropa
- Vestir prendas que cubran las extremidades, sobre todo en lugares donde haya mayor exposición a esos insectos
No existe una vacuna específica para la encefalitis equina del este y, de acuerdo con las estadísticas, en EE. UU. se diagnostica un promedio de seis casos al año. Massachusetts, Nueva York y Carolina del Norte también registraron la presencia del virus, pero sin reportes de humanos infectados.
Sin embargo, podría existir la posibilidad de que esta enfermedad, al igual que otras más comunes cuyo vector sea un mosquito, se vuelvan más frecuentes y se extiendan por otras áreas del país, principalmente a causa de los efectos del cambio climático.
Arbovirosis
Los arbovirus son el conjunto de virus transmitidos por artrópodos, frecuentemente implicados en las enfermedades emergentes. Los vectores habituales son mosquitos, garrapatas y flebotomos.
Meningitis y encefalitis
Las infecciones en el cerebro y la médula espinal pueden causar una inflamación peligrosa, la cual puede producir una amplia gama de síntomas como fiebre, dolor de cabeza, o confusión y en casos extremos daño cerebral, accidente cerebrovascular, convulsiones, o la muerte.
La infección de las meninges, las membranas que rodean al cerebro y la médula espinal, se llama meningitis y la inflamación del cerebro solo se llama encefalitis. La mielitis es una infección de la médula espinal. Cuando el cerebro y la médula espinal se inflaman, la enfermedad se llama encefalomielitis.
La meningitis viral o aséptica es la forma más común de meningitis en los Estados Unidos. Esta enfermedad típicamente leve, que no es mortal, es generalmente causada por enterovirus, virus comunes que entran al cuerpo por la boca y viajan al cerebro y los tejidos circundantes, donde se multiplican. Los enterovirus están presentes en el moco, la saliva y las heces y pueden transmitirse por contacto directo con una persona infectada o un objeto o superficie infectado.
La encefalitis puede ser causada por una infección bacteriana y, más frecuentemente, por infecciones virales. Anualmente se informan varios miles de casos de encefalitis, pero realmente pueden producirse muchos más, ya que los síntomas pueden ser leves o no existentes en la mayoría de los pacientes.
La mayoría de los casos de encefalitis en los Estados Unidos es causada por enterovirus, virus del herpes simple tipos 1 y 2, el mordisco de un animal rabioso (virus de la rabia), o arbovirus, que se transmiten de animales infectados a humanos por la picadura de una garrapata infectada, un mosquito, u otro insecto que succiona sangre.