El objetivo del trabajo es desactivar la función antitumoral que poseen estas células, denominadas pericitos, y obligarlas a trabajar en la expansión del tumor
Investigadores españoles han observado cómo consigue el glioblastoma, el cáncer más agresivo, invadir el tejido cerebral sano sin apenas resistencia.
Según informaron el miércoles los medios españoles, con este hallazgo los expertos del Instituto de Neurociencias UMH-CSIC en Alicante y el IMIB-Arrixaca de Murcia podrían frenar la progresión de este cáncer cerebral.
El objetivo del trabajo, publicado el lunes en la revista PNAS, es desactivar la función antitumoral que poseen estas células, denominadas pericitos, y obligarlas a trabajar en la expansión del tumor. Este cambio en la función de los pericitos, que dejan de ser células defensoras para convertirse en “enemigas”, lo logra el glioblastoma alterando uno de los servicios de limpieza celular, la autofagia mediada por chaperonas.
Y es que mediante la autofagia, la célula descompone y destruye proteínas dañadas o anómalas, y las chaperonas son proteínas que trabajan activamente en esta tarea. La alteración por el glioblastoma de este servicio de limpieza cambia la función de defensa proinflamatoria de los pericitos por otra inmunosupresora, que favorece la supervivencia del tumor.
Concretamente, los investigadores pudieron comprobar en un modelo de ratón que el bloqueo de esta autofagia anómala dificulta el desarrollo del tumor, al provocar la adhesión defectuosa del glioblastoma al pericito y, con ello, la muerte de las células cancerosas, por lo que se convierte en un objetivo terapéutico prometedor.
Trabajos previos del grupo mostraron que la influencia del glioblastoma sobre el pericito impide que los linfocitos T destructivos puedan atacar al tumor. “Por eso el cerebro no detecta el glioblastoma y no puede reaccionar contra él”, asegura el director del grupo de Neurobiología Experimental del Instituto de Neurociencias, Salvador Martínez.
Este nuevo hallazgo del grupo estrecha el cerco contra este agresivo tumor cerebral y está en sintonía con la hipótesis actual sobre el papel de la autofagia en la supresión de los primeros estadios del desarrollo tumoral y cómo las alteraciones en este proceso contribuyen a su progresión.
Con información de Hispantv
Continúa leyendo…