La muerte a veces se muestra como nuestra enemiga cuando hace desaparecer a personas que valen la pena. Recuerdo en este triste momento a un gran luchador venezolano, Simón Bolívar, ese caraqueño americano que nos dio las señales más claras de comportamiento frente a los invasores. Nos dio la Patria y nos enseñó a ser Patriotas en aquellos tiempos en que el invasor negaba nuestra libertad. Aunque América Latina no llegó a ser la Patria Grande que hubiéramos querido, aún conservamos esas grandes lecciones libertarias.
Por eso, como el mejor homenaje al Presidente Hugo Chávez recuerdo en este instante a ese gran luchador americano:
Simón Bolívar como ejemplo preclaro de vida para todos nosotros.
Es difícil, entiendo, comportarse como Patriotas en este mundo latinoamericano tan lleno de mercaderes que sólo adoran al billete verde que proviene del Norte.
Es difícil, también, para todos nosotros nacidos y criados en la sufrida América india reconocer, de entre nuestros gobernantes latinoamericanos, a UN PATRIOTA cuando surge en este mundo poblado de mercaderes traidores que se cobijan tenazmente bajo la sombra del imperio a lanzar sus proclamas vendepatrias.
Eso es lo que vimos en Hugo Chávez, un Presidente Patriota. Vimos a este luchador venezolano como fue capaz de enfrentarse al dragón del norte, resistir su aliento de lanzallamas, negarse a entregar las riquezas de su país a las grandes empresas capitalistas que exfolian dramáticamente nuestros suelos patrios privándolos de la riqueza que puede dar de comer a todos sus hijos y que, además, pugnó por la unidad de nuestros pueblos.
La pobreza es dolorosa, la pobreza extrema es doblemente dolorosa. La corrupción de los gobiernos ha sido la espada de Damocles que ha cubierto de llagas a nuestras naciones latinoamericanas.
Todos debiéramos ser capaces de realizar el simple ejercicio de identificar aquellos gobernantes que sufren con su pueblo y que, en lugar de someterlo a una mayor explotación, buscan mejorar sus condiciones de existencia, al tiempo que pugnan por la unidad de las naciones pobres frente a la codicia de las naciones ricas. Todos debiéramos saber hacerlo, pero lamentablemente no es así.
Hoy estamos de duelo.
Murió el Presidente Hugo Chávez.
Descansa en paz hermano.
Descansa en paz, tienes una Patria bolivariana más fuerte hoy en día que, estamos seguros, sabrá mantener en alto los principios que enarbolara un día Simón Bolívar y que tú supiste recuperar para tu hermosa Patria, Venezuela.
Hasta siempre amigas y amigos.
Oremos.
Por Rolando González Altamirano