João Stédile fundador de MST: «Nosotros adoptamos una táctica que llamamos de resistencia activa»

El político y activista por los derechos de los campesinos explica que desde el ascenso al poder de la derecha en Brasil la reforma agraria quedó paralizada y se han visto en la obligación de replegarse sin que esto signifique dejar de luchar por una repartición justa de las tierras

João Stédile fundador de MST: «Nosotros adoptamos una táctica que llamamos de resistencia activa»

Autor: Sofia Belandria

El Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) de Brasil está en una etapa de resistencia, esperando que el equilibrio de fuerzas no sea tan adverso para la organización y movilizándose por luchas más generales, dijo uno de sus fundadores, João Pedro Stédile.

«Nosotros como MST adoptamos una táctica que llamamos de resistencia activa: resistir, tratar de explicar a la gente lo que ocurre, pero tomando en cuenta los límites que la correlación de fuerzas nos impone», señaló el dirigente.

Stédile añadió que actualmente el MST tiene unas 80.000 familias «acampadas» en todo el país, tanto en caminos como dentro de las haciendas.

«Esa es nuestra capacidad inmediata de movilización, pero nuestra base entiende que la correlación de fuerzas es adversa, entonces nos quedamos como en un tiempo de espera; no es el momento ahora de entrar a enfrentarse directamente con el latifundio, porque eso puede resultar en una violencia donde los únicos que perdemos somos nosotros», analizó.

Stédile explicó que «ya desde» el Gobierno de Michel Temer (2016-2018) se paralizó la reforma agraria, por lo que «ya no hay más expropiaciones de tierras».

«Desde el punto de vista de conquistas concretas, de tierra para trabajar, no vamos lograr avanzar, entonces tenemos que organizar a nuestra gente para que ellos se vinculen más a las luchas generales de la clase trabajadora y del pueblo en general, o sea, a la lucha política», sostuvo el activista.

Por esto mismo, añadió, la organización puso «mucha energía» en la campaña para la liberación del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011).

A principios de este mes, la justicia brasileña decidió que es inconstitucional que alguien esté preso hasta que no haya agotado todos los recursos de apelación, lo que supuso la inmediata salida de Lula de prisión, donde pasó 580 días cumpliendo una pena de ocho años y 10 meses por corrupción y lavado de dinero.

Stédile destacó que, salvo en algunos estados del país, en especial los del nordeste, donde hay gobiernos estaduales progresistas, el movimiento no ha avanzado en la toma de tierras.

«A nivel general hay una paralización completa, no solo de la reforma agraria, sino de todas las políticas públicas que de alguna forma con Lula y (la expresidenta) Dilma (Rousseff, 2011-2016) favorecían al campesinado; no es solo los sin tierra que están siendo excluidos, todo el campesinado brasileño está siendo excluido», aseguró el dirigente.

Los orígenes del MST se remontan a la década de 1970, en plena dictadura militar, cuando campesinos del nordeste del país comenzaron a movilizarse para colonizar tierras despobladas e improductivas de esa zona, aunque el primer congreso nacional del movimiento fue en enero de 1985, fecha que para muchos fue fundacional.

Actualmente la organización está presente en 24 de los 26 estados de Brasil.

Cortesía de Sputnik


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano