Las abejas de las orquídeas reciben este nombre porque, contrario a lo que comúnmente pasa con el resto de estos insectos, son los machos los que polinizan mientras recolectan fragancias de flores de la familia Orchidaceae, las cuales mezclan, y se sospecha que las utilizan para atraer a las hembras. Durante ese proceso polinizan a cerca de 675 especies neotropicales de estas plantas.
Lorena Téllez Farfán, magíster en Ciencias – Biología de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), realizó un estudio taxonómico con el fin de evaluar los caracteres morfológicos con los que hasta el momento se habían clasificado las especies de abejas que forman parte del género Euglossa –particularmente el subgénero Glossura–, y además determinar la posible relación entre la distribución geográfica y sus variaciones.
A partir de la revisión de 2.093 individuos, se logró establecer que a la fecha Colombia cuenta con 17 especies dentro del subgénero Glossura; estas son: E. intersecta, E. rugilabris, E. allosticta, E. viridifrons, E. asarophora, E. natesi, E. lugubris, E. imperialis, E. ignita, E. bazinga, E. orellana, E. flammea, E. chalybeata, E. occidentalis y tres especies nuevas.
De estas, E. bazinga no había sido registrada para el país, y E. chalybeata no había sido confirmada. Euglossa piliventris no se encontró y E. lugubris presentó variaciones morfométricas entre las poblaciones de los Llanos Orientales y el Amazonas.
Se trata de un grupo que ha representado un reto para los científicos al momento de realizar una clasificación taxonómica en la que se separen sus especies. Por ejemplo, en los años noventa la composición del subgénero Glossura en Colombia tenía seis especies claramente diferenciables a partir de caracteres morfológicos discretos; sin embargo, después de 2000 se encontraron especies crípticas (muy parecidas entre sí) dentro del grupo y se reacomodaron otras en este, además de otros subgéneros.
Así mismo, los caracteres propuestos para las nuevas especies no fueron muy claros para poder separarlas, por lo que la composición taxonómica del grupo para el país quedó por definir. A esta situación se enfrentó la investigadora Téllez, quien exploró la composición de las especies dentro del subgénero Glossura –incluyendo Glossuropoda– en Colombia mediante la evaluación de caracteres discretos y continuos.
La intención era ver qué había pasado con las especies de estos grupos en los últimos años, a partir de los nuevos descubrimientos que sobre estas abejas se han depositado en colecciones como las de la UNAL, la Colección Taxonómica Nacional de Insectos Luis María Murillo, la Colección Entomológica del Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt, la Colección de Entomología de la Universidad de los Andes, la Colección Entomológica del Museo de Historia Natural de la Universidad del Cauca y la Colección Entomológica de la Universidad Javeriana.
Con los 2.093 individuos revisados se realizó una caracterización de morfología externa, de genitales, mediciones lineales y análisis estadísticos para soportar la existencia de las especies.
La investigadora también encontró que el grupo orellana presentó las mayores dificultades para su clasificación, por ser diverso y estar compuesto por varias especies crípticas. Dentro de este se habían descrito dos especies nuevas que estaban siendo tomadas como E. chalybeata, y con este trabajo se describieron tres más que antes habían sido identificadas como E. imperialis, E. flammea y E. ignita.
Fuente: http://agenciadenoticias.unal.edu.co/, Agencias
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