El representante de la alta comisionada de las Naciones Unidas afirmó que esta cifra refleja «la falta de presencia integral del Estado»
La impunidad ante el continuo asesinato de defensores de derechos humanos colombianos quedó reflejada en un informe que este martes publicó el representante de la alta comisionada de Derechos Humanos de la ONU en la nación sudamericana, Alberto Brunori.
«Tengo que decir con tristeza e indignación que por lo menos 86 defensores fueron asesinados en Colombia en lo que va de 2019. A muchos de ellos los conocíamos, supimos de su labor valiente», manifestó el funcionario.
Agregó, como ya lo han denunciado un sinnúmero de veces los familiares de las víctimas y las organizaciones sociales, que estas cifras muestran «la falta de presencia integral del Estado».
«Se está fallando en el fortalecimiento de las democracias de igualdad y dignidad, porque no se está protegiendo el derecho a la vida», advirtió.
En este sentido, detalló que los crímenes ocurrieron en un contexto de «estigmatización de su labor y de sus reclamos» y en lugares apartados donde «el ejercicio del derecho a la justicia y a los derechos económicos, sociales y culturales es precario».
Según el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), desde que se firmó el acuerdo entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), 837 líderes sociales y defensores de derechos humanos y excombatientes fueron asesinados en todo el país, reseñó el portal Actualidad RT.
Fuentes: ONU, Actualidad RT, Telesur.