Cuando se cumplen dos meses del estallido social, que iniciaron los y las estudiantes el 18 de octubre de 2019, el equipo de Londres 38 llegó hasta el palacio de la Moneda, instalando en el frontis de la casa de gobierno una vitrina llena de casquillos de lacrimógenas y perdigones utilizados por las fuerzas represivas del estado contra los manifestantes.
La acción estuvo acompañada de una pancarta con la frase «¿Nunca Más? ¡No más! ¡No Más! ¡No Más! Tortura, asesinatos, impunidad», en referencia a la promesa, incumplida, hecha al pueblo iniciada la llamada transición a la democracia. También, se exigió el cese de la criminalización de la protesta y la instalación de la impunidad en el presente.
Luego de permanecer frente al palacio de gobierno, los manifestantes se trasladaron hasta el frontis del Tribunales donde se encuentra en #CampamentoDignidad y repitieron la acción de denuncia. En ambos lugares los transeúntes pudieron escribir en la base de la vitrina sus demandas al gobierno.
Erika Hennings, integrante de la mesa de Londres 38, leyó en ambos puntos el siguiente comunicado:
Comunicado Londres 38, espacio de memorias
Desde que terminó formalmente la dictadura civil-militar el año 1989, el «Nunca más» fue acuñado como slogan de una supuesta transición a la democracia, que surgió vacío de contenido. Esta demanda, que exigía un país que respetara los derechos humanos y luchara contra la impunidad, por la verdad y la justicia para todos y todas quienes habían sido víctimas de 17 años de violencia sistemática, quedó sin respuesta para ir convirtiéndose a lo largo de los años, en más y más desigualdad, más y más injusticia, más y más represión.
El Nunca más es letra muerta. Durante las décadas de la posdictadura, y con particular violencia durante la protesta social que gatilló el estallido social el 18 de octubre, el Estado ha desplegado una masiva y sistemática represión buscando criminalizar el movimiento social y sus justas demandas.
Es por esto que hoy frente a La Moneda, sede del poder político, venimos a decir una y mil veces No más:
¡No más represión, no más torturas, asesinatos y cárcel, no más impunidad!