Los habitantes de la ciudad de Viena, capital de Austria, podrán optar a entradas gratuitas para espectáculos o museos si se desplazan a pie, en bicicleta o en los transportes públicos.
Se trata de una estrategia puesta en marcha por el gobierno local, mediante una aplicación móvil que reconoce el modo de transporte utilizado, reseñó la agencia AFP.
La “recompensa” que ofrece el Ejecutivo local se basa en que cada vez que se eviten emisiones acumuladas de 20 kilogramos de CO2 en comparación con los mismos traslados realizados en automóvil, el residente ecológico recibirá una “ficha cultura”.
La ficha podrá ser intercambiada por una entrada para una de las cuatro instituciones asociadas al proyecto: un museo, una sala de exposiciones, de conciertos y un teatro.
Según Christina Hubin, responsable del proyecto, es posible ganar una ficha trasladándose al trabajo en medios de transporte alternativos al coche durante una media de quince días.
“Queremos recompensar la reducción de CO2 con una experiencia cultural”, explicó en conferencia de prensa el edil vienés encargado de asuntos digitales, Peter Hanke.
El 26 de febrero comenzó un período de prueba con una muestra de mil usuarios. Si la iniciativa se revela eficaz se extenderá a todos los interesados.
La capital austriaca ofrece a sus 1,8 millones de habitantes transportes públicos de calidad por solamente un euro diario si son titulares de una tarjeta anual para estos servicios.
Viena cuenta actualmente con más abonados anuales al metro, autobuses y tranvías que automóviles matriculados.
El Gobierno de coalición austriaco, entre conservadores y ecologistas que asumió a comienzos de enero, aspira a lograr la neutralidad de sus emisiones de carbono para 2040, es decir, una década antes del objetivo fijado por Europa.