Como una buena noticia calificó la ambientalista Sara Larraín la decisión de la Corte de Apelaciones de Copiapó que ordenó paralizar las faenas de la mina Pascua Lama, en la zona de Huasco.
La Directora del programa Chile Sustentable recordó que las organizaciones ambientales y ciudadanas han denunciado públicamente desde hace años el impacto que significaría para los glaciares, el abastecimiento hídrico y para el ecosistema la realización de este proyecto minero binacional.
“Pero los gobiernos de la Concertación y de la Alianza no hicieron caso hasta que la evidencia de la destrucción fue demasiado evidente. La decisión de hoy de la Corte de Apelaciones, que ha respondido a las denuncias sobre seguridad laboral, riesgos para los trabajadores y contaminación de aguas con metales pesados, es una muy buena señal de que al menos la justicia hará cumplir la RCA del proyecto y la ley ambiental”, explicó.
Larraín afirmó que el país esta enfrentado un quinto año de sequía que ha dejado en evidencia la dependencia que existe respecto de los glaciares para el abastecimiento de agua tanto para consumo humano como para actividades económicas.
“Prueba de ellos son regiones como Copiapó, donde los glaciares intervenidos por el proyecto, Toro I y II y Esperanza han disminuido cerca de un 60% a causa de faenas de exploración minera. Y eso significa menos agua, debido a contaminación por metales pesados y a la destrucción de los glaciares”, dijo.
La ambientalista destacó que fue a partir de Pascua Lama que la sociedad chilena tiene conciencia de la existencia y la relevancia de los glaciares. “Pero la minería los ha intervenido a lo largo de 30 años y por ello el país ha perdido el equivalente a 32 millones de metros cúbicos de agua”, precisó.
Destacó que si bien el proyecto de la canadiense Barrick Gold es relativamente más conocido en términos del impacto y destrucción de glaciares, otras empresas mineras como Codelco, Anglo American y Antofagasta Minerals también está interviniendo glaciares. De hecho, el proyecto 244 de expansión de Codelco Andina ha declarado que aumentará el área de destrucción de estas fuentes de agua.
“El tema de fondo es que los glaciares no están protegidos por ley en Chile. Tenemos una estrategia nacional de glaciares que no es vinculante y que además los definen como recurso renovables, algo que en ninguna legislación del mundo se acepta. Es sumamente importante reactivar la tramitación en el Senado de la Ley de Protección de Glaciares que está sin discusión desde 2008”, concluyó Larraín.
Santiago, 10 de abril
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