El Consejo del Instituto Nacional de Derechos Humanos, aprobó el pasado 2 de marzo de 2020, el Informe de la Misión de Observación realizada en la Comuna de Mariquina (Región de Los Ríos) en 2019, y que da cuenta de la preocupante y cada vez mayor limitación al acceso al agua que está afectando a las comunidades Mapuche que habitan la zona.
A partir del levantamiento de antecedentes y la realización de entrevistas y grupos focales a las comunidades de la zona, el INDH pudo constatar la existencia de potenciales afectaciones al derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación producidas por la expansión de la industria forestal y celulosa, y la débil institucionalidad indígena y ambiental del Estado de Chile.
Actualmente, la mayor parte de la superficie donde se ubican los terrenos de las comunidades indígenas de la comuna de Mariquina está cubierta de plantaciones forestales de monocultivo o se está usando en una actividad agrícola-ganadera precaria. La degradación de los suelos en esos lugares es evidente, sobre todo en los terrenos que colindan con las grandes plantaciones forestales.
Un aspecto preocupante para las comunidades, los funcionarios municipales y las organizaciones sociales sobre el incremento de la superficie plantada con monocultivos en la zona es su posible impacto en la disminución de la cantidad de agua disponible, lo que podría traer consecuencias negativas para el medio ambiente, la economía y la salud de las personas, alterando los modos de vida ancestrales de las comunidades indígenas de Mariquina.
Según el PLADECO de la comuna de Mariquina, “uno de los problemas que afecta al territorio es la escasez hídrica. Si bien, se considera a las empresas forestales como las principales responsables de este fenómeno, los distintos actores también la asocian al cambio climático. Sus efectos se evidencian principalmente en la agricultura. Existe una proyección de que de 5 a 10 años hay zonas que no van atener nada de agua”.
Dicha afirmación -que afecta a todo el territorio de la comuna de Mariquina- es concordante con los relatos de las comunidades entrevistadas, quienes dan cuenta de un aumento sostenido de la escasez hídrica en la comuna en los últimos 20 años, lo que ha afectado la producción agrícola en el sector, relato que va en sintonía con los derechos de agua otorgados en la comuna durante la década del 2000.
Una de las agrupaciones mapuche de la zona (Rangiñ Tu Mapu), en petitorio hecho a la empresa Arauco en abril del año 2019, señala que “la disponibilidad de agua para consumo humano y productivo forma parte de las preocupaciones centrales en todos los territorios, tanto por la cantidad como la calidad de ésta” añadiendo que “en la mayor parte de los predios forestales se observa la existencia de plantaciones que llegan hasta los cursos de agua sin que se observen cambios en esta práctica tras las cosechas y plantaciones recientes. Para las comunidades participantes de este proceso, esta situación merma la disponibilidad de agua en cursos superficiales y deteriora la calidad de ésta durante las faenas, afectando también la recarga de acuíferos que abastecen pozos y norias en el valle.”
Además, culturalmente, para el pueblo mapuche el agua ocupa un rol preponderante en su cosmovisión toda vez que es un elemento indispensable para la generación y mantención de los menoko.
Puedes acceder al informe de la Misión de Observación a la comuna de San José de la Mariquina, en el siguiente link: https://bibliotecadigital.indh.cl/handle/123456789/1705