En las últimas horas, los funcionarios de la Federación Histórica Nacional de Trabajadores de la Salud (FENATS) del Hospital El Carmen de Maipú (HEC), denunciaron la precariedad en cuanto a políticas de recursos humanos en la que se encuentran.
En plena pandemia por Covid-19, en que los funcionarios de la salud son medulares en el control de la crisis sanitaria, los trabajadores del HEC manifestaron estar viviendo “una de las políticas de recursos humanos más nefastas en este contexto”.
Los trabajadores denunciaron que desde las diversas jefaturas del establecimiento, han emanado medidas como que los empleados con Covid-19 positivo deberán realizar cuarentena de 14 días, pero sin examen de salida, lo que se traduciría en que si uno de ellos no presenta síntomas pasado el tiempo en que el virus se encuentra activo, deberían volver a sus labores en el hospital.
Otra de las medidas que -denuncian los funcionarios- propusieron desde la jefatura, es que se suspenden las cuarentenas preventivas desde el 22 de mayo, teniendo que volver a realizar sus labores. Esta disposición -sin examen que determine el buen estado del trabajador al momento de terminar la cuarentena- estaría siendo contradictoria con lo que determinó la Subsecretaría de Salud Pública el pasado 24 de marzo, según declararon los trabajadores del recinto.
Relacionado con lo mismo, en el comunicado dado a conocer por la FENATS se señala que «se le instruye a las jefaturas que los trabajadores de alto riesgo retomen sus funciones a la brevedad, dependiendo las vidas de los trabajadores de los criterios diversos que cada jefatura pueda o no tener».
En cuanto a los tiempos de descanso, alimentación y espacios comunes, los trabajadores denunciaron que la dirección del HEC estaría solicitando a los empleados almorzar en 15 minutos, “afectando de forma importante su salud mental”. Añadieron que, además, no cuentan con los espacios suficientes para respetar la distancia social de un metro. En esa misma línea, acusan que las autoridades del recinto hospitalario decretaron que una de sus medidas será poner notas de demérito -es decir, anotaciones negativas- a quienes no sean responsables con estas medidas.
Respecto a esto último, los funcionarios señalaron que la dirección del Hospital manifestó que los trabajadores que no cumplan con el uso de mascarillas e implementos adecuados, serán castigados con dichas anotaciones negativas. “Esta dirección establece medidas que castigan, reprimen y manifiestan la poca voluntad de aspirar a un servicio construido en base al respeto para las y los trabajadores”, enfatizaron. Además, advirtieron que “no hay mascarillas día a día, sino que se usan cada 3 días y sin mascarillas para el cambio ni traslado de las y los funcionarios a sus domicilios”.
En cuanto a los exámenes de salida de los funcionarios que han sido contagiados de coronavirus, señalaron que les “parece un atentado considerar márgenes de error para aquellos trabajadores que se encuentren con el virus, sin la seguridad que este pueda estar activo o inactivo dentro del cuerpo”. Los funcionarios añadieron que al no existir un marco que regule el retorno del personal que se encontraba bajo medidas preventivas por haber estado en contacto estrecho con un confirmado de Covid-19, se agudiza más el problema.
De acuerdo a lo que alertaron los trabajadores, el director del recinto, Juan Kehr Soto, habría señalado que «querría realizar test PCR a los que están en cuarentena de salida (siendo que el mismo jefe ministerial señala que no), así interrumpir las cuarentenas preventivas y que estas medidas deben aplicarse al total de los servicios para el recurso humano». Según los mismos empleados, Kehr señaló que «habría un déficit de funcionarios a nuestro juicio innecesario».
Los trabajadores, por su parte, exigen a la dirección examen de salida para los funcionarios positivos de Covid-19; retractarse de la medida en cuanto a las notas de demérito a aquellos en situación de pandemia; respetar la vida de los que estén en alto riesgo, dejándolos en cuarentena total; mantener la medida preventiva a los contactos estrechos; y más tiempo de colación, considerando sus 45 minutos mínimos de alimentación básica.