La directora general de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa Etienne, recordó este martes 30 de junio que la región ha notificado más casos de Covid-19 que cualquier otra, «pero las cifras generales solo cuentan una parte de la historia».
«La batalla es dura, pero está lejos de estar perdida. Todavía queda mucho por hacer y nuestra región tiene la fuerza de voluntad, la solidaridad y las herramientas para hacer que la curva de Covid-19 empiece a bajar y para mantenerla baja», dijo en una sesión con medios de comunicación.
Asimismo, advirtió que América del Sur y Centroamérica podrían enfrentar su pico de contagios entre los próximos meses de julio y agosto si se mantienen las actuales condiciones de expansión de la pandemia, reseñó Telesur.
En este sentido, reiteró que los países que planean relajar las medidas de salud pública deben adoptar un enfoque escalonado basado en las condiciones locales y estar preparados para imponer nuevamente medidas preventivas si la situación epidemiológica cambia.
«La clave es pensar tanto a nivel nacional como local y basar las decisiones en los últimos datos. Cuanto más granular sea nuestra comprensión de dónde ataca el virus, más dirigida será nuestra respuesta. Como estamos viendo, los países, estados y ciudades que no adoptan medidas preventivas o relajan las restricciones demasiado pronto pueden verse inundados de nuevos casos», indicó Etienne.
La representante de la organización dijo que «el tiempo es crítico» y exhortó a los países a abrir gradualmente, a escala nacional o local, adoptando el enfoque escalonado que se base en una sólida vigilancia, datos y una mayor capacidad de seguimiento de contactos y pruebas.
Por otro lado, recordó que se han notificado 5,1 millones de casos y más de 247.000 muertes debidas a Covid-19 en las Américas hasta el 29 de junio. Aclaró que La reapertura no consiste simplemente en suspender las restricciones de los viajes y las órdenes de quedarse en casa, sino que requiere implementar un conjunto de medidas de salud pública para localizar los nuevos casos y desarrollar la capacidad suficiente para detectar y controlar nuevos brotes.
«A menudo escuchamos sobre el número de casos en grandes países como Brasil, México o Estados Unidos sin la apreciación de su considerable diversidad social y geográfica. De hecho, conviven múltiples curvas epidemiológicas tanto dentro de nuestra región como dentro de cada país, y las respuestas de salud pública deben adaptarse a estas situaciones específicas», manifestó.
Finalmente, afirmó que la región de las Américas está ahora en el centro de la respuesta a la pandemia y estará a la altura de las circunstancias.
Fuentes: OPS, Telesur.