En medio de la pandemia por COVID-19 se hace vital que las comunidades en las ciudades continúen los procesos de formación para la siembra, dijo ministra de Agricultura Agrourbana, Gabriela Peña, quien aseguró que en los últimos meses esa cartera capacitó a más de 7.000 personas en el área.
«Hemos capacitado a 7.433 personas, a ellas le entregamos certificados de participación y en estas campañas que hemos tenido, hemos logrado registrar 9.617 Brigadas Agroproductivas. Las Brigadas Agroproductivas son la orgánica de nuestra política, son personas que se unen para producir», indicó la ministra.
Estas brigadas, de acuerdo a lo que ha explicado el ministerio, son grupos de personas de una comunidad que tienen los conocimientos necesarios para la instalación de huertos agrourbanos en diversos niveles, y de acuerdo a la necesidad de la zona en la que se desarrolla el proyecto.
Antes de la pandemia estas capacitaciones, señaló la ministra, se hacían de manera presencial, pero la frecuencia ha disminuido solo a casos estrictamente necesarios.
Presencia en redes
En medio de la cuarentena social, el ministerio ha apostado por las redes sociales para educar a la población.
En ellas, explicó la ministra, se distribuyen videos, tutoriales, recomendaciones y se permite interactuar con la población para atender sus inquietudes.
«Esto ha sido bastante interesante porque la participación ha sido protagónica por parte de los participantes, que no solamente se han quedado con la capacitación a través de los diversos medios: WhatsApp, Facebook, radios comunitarias, sino que también nos envían sus videos con la planta, con innovaciones en las diversas modalidades de producción», contó.
Una forma de siembra vertical a la que el ministerio le ha puesto empeño en los últimos meses ha sido el «aliñopónico», especialmente para urbanismos verticales, y la ministra indicó que se trata de un sistema muy sencillo que permita a la población sembrar los aliños más utilizados en las comidas venezolanas y a la vez reciclar.
«El aliñopónico es una modalidad de producción vertical que es más que todo para las casas pequeñas y realmente lo lanzamos para los urbanismos de la Gran Misión Vivienda Venezuela, sin embargo, las viviendas también lo han adoptado y ha sido innovador; porque el aliñopónico lo puedes hacer con potes de refresco, bambúes, tubos pvc. Hay diversidad de materiales de reciclaje que puedes usar para tener aliñopónicos en casa», indicó.
Producir es vencer
Bajo el eslogan «producir es vencer», detalló Peña, se desarrolla el plan estratégico del ministerio y está integrado por cinco ámbitos y cuatro programas.
El primero de ellos está enfocado en la agricultura urbana, comunal y familiar, mientras el segundo se centra en crear un tejido de productores y el tercero de distribución de insumos a nivel nacional, expuso la funcionaria.
Uno de los logros de este proyecto, señaló, «es la creación de una comisión nacional de producción de plantas Alimentos Balanceados para Animales (ABA) que permite que cuando entregamos los semovientes a los productores, puedan tener también el alimento garantizado».
«Eso ha sido una victoria de la gestión, en vista de que siempre el inconveniente se presenta en el intermediario. Allí le hemos dado un golpe a la dependencia de las importaciones y hacia allá seguiremos avanzando», expuso.
Este tipo de plantas, detalló la ministra, se han instalado en 12 estados del país y las autoridades están trabajando de forma intensa con la siembra de forraje y con conversaciones con otros productores para tener otras alternativas de alimentos balanceados para el ganado, para así evitar la dependencia de la soya.
Además, apuntó que se han creado cuatro programas: Semilla Soberana, Viviendas Productivas, Agrosoporte para la vida y Proteína pa» la familia, que se centran en las principales necesidades que tiene el eje agrourbano en Venezuela.
Autosustentable
Ante el bloqueo económico de Estados Unidos, Peña indicó que lo que se busca es el autoabastecimiento de la población, pero también generar un proyecto que sea sustentable y sostenible.
Una de las prácticas que han empleado, dijo la ministra, es entregar los insumos, herramientas, bioinsumos y semillas, para que el pequeño productor no tenga necesidad de buscar financiamiento.
«Acabamos de cerrar la entrega de maíz, el Plan Siembra de Maíz 2020. Entregamos semillas y bioinsumos a los productores, y luego ellos al tener la cosecha, nos arriman el 35% de esa cosecha como pago por los agrosoportes que se les entregaron para ellos poder continuar fortaleciendo su iniciativa productiva», explicó.
Para la funcionaria otro de los aspectos fundamentales de su gestión es que la agricultura urbana sea ecológicamente equilibrada, económicamente viable, culturalmente diversa y justa.
Cortesía de Sputnik
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