Las autoridades de La Habana decidieron imponer desde el 1 de septiembre un toque de queda que prohíbe la movilidad entre las 19:00 y las 05:00 hora local (23:00-09:00 GMT), entre un grupo de nuevas restricciones que se aplicarán a partir del próximo lunes 1 de septiembre, para intentar frenar la propagación del covid-19.
«El incumplimiento de varias medidas orientadas y la falta de disciplina de algunas personas e instituciones produjeron un rebrote (del covid-19). Como consecuencia, tuvimos que regresar a la fase de transmisión autóctona limitada desde el 7 de agosto», explicó el jueves el gobernador de La Habana, Reinaldo García Zapata.
Entre las medidas anunciadas por las autoridades de la capital cubana está el cierre de los centros que no sean de producción continua o servicios priorizados, y sólo se mantendrán en sus tareas los trabajadores imprescindibles, dando prioridad al trabajo a distancia.
La prohibición de movilidad es para personas y vehículos, y se advierte que se retirará la placa a los autos que no cumplan con esta disposición.
El funcionario dijo que se revaluarán los permisos de autorización (vía libre) a los vehículos estatales y se restringirá significativamente el movimiento de autos, motocicletas y otros medios de transporte particulares.
A su vez, se eliminará el traslado a otras provincias del país por motivos turísticos o vacacionales, y la entrada o salida de La Habana será altamente restringida.
Se eliminará por 15 días la salida de La Habana por motivos de trabajo a todos los organismos e instituciones.
Las nuevas disposiciones limitan el traslado entre municipios de vendedores ambulantes, los horarios de venta de tiendas serán desde las 09:00 hasta las 16:00 horas, solo para los residentes del municipio donde se encuentre la tienda, y se organizará y potenciará venta de módulos de alimentos y aseo.
El gobernador de La Habana está facultado para aplicar multas severas a quienes no usen mascarillas, a centros que no tengan o no exijan el uso de pasos podálicos, a quienes estén en áreas públicas, parques, zonas deportivas, centros culturales, y cometan otras indisciplinas.
Los índices de detección de personas contagiadas con el covid-19 en La Habana se dispararon en la última semana de julio, y actualmente se trabaja para frenar la propagación del virus en varios focos localizados en diferentes zonas de la urbe cubana.
Hasta el miércoles, Cuba registraba 92 fallecidos y 3.759 casos positivos del nuevo coronavirus SARS-CoV-2.
Fuente: Sputnik
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