A causa de la aprobación del proyecto de mejoramiento de la Ruta CH 199, tramo Puesco al paso Mamuil Malal, en la comuna de Curarrehue, el gobierno a través del Ministerio de Obras Públicas (MOP) cortaría ocho araucarias (pu pewen), resolución aprobada recientemente.
El municipio de Curarrehue y vecinos del sector plantearon al Gobierno sobre el significado de estos árboles para las comunidades del territorio y para la comuna en general es alimento, abrigo, artesanías, belleza escénica, riqueza biológica, diversidad ambiental natural y significancia espiritual.
Un hecho que trascendió y que causa inquietud, según manifestó una dirigente, es que el ensanche de este camino cortaría dos araucarias jóvenes, pero un centro católico en el sector ha solicitado mayor ensanche en este tramo para un sendero de peregrinación que será utilizado una vez al año por 3 horas aproximadamente. La institución involucrada corresponde a la iglesia católica de Curarrrehue, parroquia san Sebastián, quienes todos los años hacen un encuentro “chileno – argentino”.
Cabe mencionar que el proyecto de obra luego de la aprobación del estudio de impacto ambiental, por parte del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) ya estría en condiciones de ser llamada a licitación con una inversión de 9 mil millones de pesos, estimando el titular que este fin de año se puede iniciar la mega obra en la comuna de Curarrehue.
Frente a esto, como una manera de compensación, el gobierno regional se habría comprometido a una serie de medidas, como es la plantación de unas dos mil plantas de araucarias, más unas trescientas de otras especies nativas como ñirre, coigue y notro; Fiscalización a los tiempos de nidificación de las aves en la laguna Quillelhue; y mano de obra local para los trabajos de obras una vez iniciado el proyecto, entre otras.
La tala de un árbol protegido y sagrado
Más allá de las formas de “compensación”, es preocupante el precedente que se está marcando con este acto ya que se está imponiendo otras normativas por sobre la protección que tiene la araucaria, cuestión que marcaría un precedente y con el riesgo de ser vuelto a replicar a cuanto antojo surja y asimismo, la desconsideración sobre la importancia de la existencia de este árbol para la cultura Mapuche Pewenche, en atención a que se trata de un árbol sagrado.
La araucaria tiene como nombre original el PEWEN y se refiere a la sacralidad, frutos, abundancia, respeto, que para llegar a su ciclo de madurez han pasado ya cientos y miles de años, con singulares características y propiedades y que es parte de las diversas expresiones religiosas mapuche en las zonas cordilleranas.
Para la alimentación, el Pewen ofrece el Nguillio (Piñón), sabrosas semillas comestibles ricas en carbohidratos, minerales y proteínas, garantizando la alimentación y la salud de la población y que es distribuida ampliamente, utilizada en todo tipo de comidas.
El decreto de protección de la araucaria es el Decreto Supremo 43 promulgado el 19-3-1990 del ministerio de Agricultura. En él se expresa claramente que la especie está protegida en todas las áreas donde se presente. Por su parte, cabe mencionar que la protección a los espacios sagrados de las comunidades, está contemplado en diversas disposiciones locales e internacionales, tales como la Ley indígena 19.253 y normas y tratados internacionales de derechos indígenas que son obligatorias al estado chileno, como el Convenio 169 de la OIT y la declaración dela ONU sobre derechos de los Pueblos Indígenas. A modo de referencia, el artículo 13 del Convenio 169, en relación a la protección de los lugares sagrados, dispone que «los gobiernos deben respetar la importancia especial que para las culturas y valores espirituales de los pueblos interesados reviste su relación con las tierras y territorios que ocupan o utilizan de alguna otra manera».
La paradójica Reserva de la Biosfera
Lo paradójico es que vastas zonas cordilleranas, como Curarrehue, están declaradas por la UNESCO como reservas de la Biosfera, que si bien directamente no están cubiertas ni protegidas por ningún tratado internacional, se seleccionan por su interés científico y la conservación y protección de la biodiversidad, también el desarrollo económico y humano de estas zonas, la investigación, la educación y el intercambio de información entre las diferentes reservas, que forman una red mundial y que los gobiernos de los respectivos Países deben respetar y promover.
En la región de la Araucanía el directorio de la reserva es encabezado por el intendente Andrés Molina, cuyo gobierno viene con este acto promoviendo la tala de araucarias y la instalación de decenas de proyectos industriales de pisciculturas salmoneras y de centrales hidroeléctricas, afectando gravemente los principios y valores que establece los criterios para una reserva.