Luego de que la presidenta de facto de Bolivia, Jeanine Añez, bajara su candidatura sin mencionar a quien apoyaría de la oposición, el postulante de Comunidad Ciudadana (CC) Carlos Mesa expresó estar dispuesto al diálogo.
Mesa, en diversas oportunidades había criticado a Jeanine, al manifestar que había traicionado la labor que se le había encomendado.
Por su parte, el candidato de Creemos Fernando Camacho quién tuvo una participación crucial para que se ejecutara el golpe de Estado contra Evo Morales criticó la determinación de la mandataria.
Camacho aseguró que la determinación de Añez no se trata de un desprendimiento sino de una derrota. “Se desplomó su candidatura desde que cedió, se arrodilló y pactó con el masismo”, indicó.
El expresidente del comité cívico de Santa Cruz destacó que Bolivia necesita un cambio y que solo lo garantiza su partido, tolda que cuenta con solo el 8% de la intención de voto según sondeos realizados en la nación.
«Salir de la corrupción y del pactismo y la convivencia de la vieja política con el masismo. Y ese cambio sólo lo garantiza Creemos”, sostuvo Camacho.
De igual forma, Jorge Tuto Quiroga, candidato de Libre 21, también se pronunció y precisó que la labor de Jeanine fue dañar la transición y empeorar la economía.
“Terminó lo que nunca debió empezar”. “Extendimos mandato solo para hacer elecciones, no cumplió. Eso fortaleció al MAS, dañó la transición, erosionó la economía y manchó a las pititas. Eliminemos la venenosa reelección presidencial inmediata”, afirmó.
Ruth Nina, candidata a la vicepresidencia de Pan-Bol, felicitó a Añez. “Ha recuperado la dignidad de las mujeres y ha demostrado una vez más que se puede dar un paso al frente por Bolivia”.
Por su parte, María Bayá, candidata de ADN, dijo que la candidatura de Añez “no era viable” porque traicionaba el 21F y traicionaba la lucha por la recuperación de la democracia.
Página Siete entrevistó al analista Franklin Pareja quien consideró que la candidatura de Añez desde hace ya un tiempo venía cayendo, y en la última recta se desplomó por efecto de tres razones: 1) La mala gestión en la lucha contra la pandemia, 2) los eventuales escándalos de corrupción y 3) el nulo aporte en la preferencia electoral de sus socios políticos.
Pareja catalogó la decisión como tardía, extemporánea. Aseguró que «no es una salida en pro de la unidad sino que es una salida porque se ha erosionado notablemente su capital político”.
Con información de Página Siete
Continúe leyendo