Estatutos de la disidencia, muestra que se despliega en el espacio principal de la galería, es un recorrido por la carrera del artista visual chileno Felipe Rivas San Martín, quien a lo largo de 13 años se ha abocado al análisis y estudio sobre temáticas en torno a la sexualidad, especialmente aquella marginada, y la inclusión del cuerpo en el arte lo que lo ha convertido en un investigador prolífico y un artista complejo y político. Residente desde hace más de dos años en Valencia, España, donde desarrolla un doctorado en arte de la Universidad Politécnica de esa ciudad, la pandemia lo sorprendió en Chile, impidiéndole su regreso a Europa, contexto en el cual preparó el trabajo que configura esta muestra.
Con textos de Juan Pablo Sutherland y Pu Aliwen, bajo la curatoría de Antonio Urrutia Luxoro, Rivas presenta obras interdisciplinarias con pinturas, dibujos, performance, video, ya exhibidas anteriormente y algunos trabajos inéditos, que dan cuenta de su formación académica como artista visual contemporáneo y su rol como activista de la disidencia sexual. La muestra explora por tanto las fronteras entre ambos campos, dando cuenta de las investigaciones y temas desarrollados por el artista a lo largo de su carrera, como sexualidad, imagen, política y tecnologías, teoría queer, archivos, posfeminismo, performatividad, entre otros.
Felipe Rivas San Martín (Valdivia, Chile, 1982) es artista visual, Master en Artes Visuales de la Universidad de Chile. Actualmente vive y trabaja en Valencia, España, donde realiza el Doctorado en Arte de la UPV, como becario de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica, CONICYT.
La muestra Pornografía para caballeros, de Isidora Bravo, que inaugura el espacio de la Factoría dedicado a trabajos de gabinete, presenta una producción gráfica y objetual pulcra que seduce a primera vista y luego perturba por las materialidades que se exponen relacionadas al cuerpo y al sexo explícito. “La obra intenta superar la experiencia visual distante que la pornografía tradicional ha normalizado en los medios, alterando la iconicidad complaciente de sus imágenes y predictibilidad del relato en el que se insertan. El trabajo de Bravo complace y seduce, pero a la vez, perturba, pues la profilaxis de la imagen es desautorizada por la materialidad con que fue construida: pelos púbicos, baba, chicle o, en otro registro, imprimiendo la imagen porno como decoración en objetos de lujo y uso cotidiano”, señala el texto de la muestra elaborado por Valentina Montero.
Isidora Bravo (Santiago de Chile, 1991). Artista de la Universidad Diego Portales, se caracteriza por el uso de materiales inusuales y cargados de contenido simbólico para hacer un comentario frente a la construcción de las imágenes. Ha mostrado su trabajo en la Biblioteca Nicanor Parra, la galería Metales Pesados, la galería D21, Il Posto, el Museo de Arte Contemporáneo de Santiago, entre otros.