El Gobierno alemán obstaculiza la investigación preliminar de Rusia sobre lo ocurrido con el opositor ruso Alexéi Navalni, anuncia un comunicado en la web de la Cancillería rusa. Además, Moscú acusa a la OPAQ (Organización para la Prohibición de las Armas Químicas) de actuar de manera inadecuada y parcial en su manejo del caso.
«El Gobierno de Alemania impide de manera activa la investigación preliminar que se realiza en Rusia sobre el incidente con Alexéi Navalni, poniendo obstáculos a que se establezca la verdad en el marco de la legislación rusa», dice el texto del comunicado.
Moscú enfatizó que el ocultamiento de información sobre la botella de agua que supuestamente contiene rastros de Novichok por parte de Berlín indica la motivación política del caso. En opinión del ministerio, tal «evidencia», y la forma en que se obtuvo, es muy dudosa desde un punto de vista legal.
El Ministerio de Relaciones Exteriores también acusó a Alemania de resistirse activamente a los esfuerzos de la parte rusa de iniciar una investigación previa al caso de Navalni, diciendo que Berlín está violando así sus obligaciones en virtud de la Convención de 1959 sobre Asistencia Legal Mutua en Materia Penal e impidiendo que Rusia logre esclarecer la verdad de lo sucedido.
En su declaración, el despacho ruso acusó también a Alemania y sus aliados de la OTAN de tratar de utilizar la OPAQ como un medio para interferir en los asuntos internos de Rusia.
«Las demandas hechas por los líderes de Alemania y sus aliados de la OTAN para que Rusia ‘brinde asistencia’ a la investigación [sobre el caso Navalni] bajo los auspicios de la OPAQ es nada menos que un intento de socavar los principios fundamentales de la Convención sobre Armas Químicas y de utilizar esta estructura internacional para interferir en los asuntos internos de un estado parte de la Convención», declara el comunicado.
La Cancillería rusa denunció un plan de «politizar este incidente con el objetivo evidente: acusar a Rusia de violar la Convención para la Prohibición de las Armas Químicas».
Las autoridades alemanas transfirieron la información relacionada con el supuesto envenenamiento de Alexéi Navalni a la OPAQ a principios de septiembre, y ésta anunció que proporcionaría asistencia técnica a Berlín. Según el comunicado del ente ruso, la OPAQ «excedió su mandato» cuando ofreció a la parte alemana «ayuda técnica en el marco del ‘supuesto envenenamiento’ de Alexéi Navalni».
Fuente: Sputnik News.