Evitar una guerra entre Armenia y Azerbaiyán es el objetivo de la Comisión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, así lo indicó su portavoz Peter Stano.
El 27 de septiembre estallaron hostilidades con el uso de artillería, aviación y sistemas de misiles en la línea de contacto que separa a las fuerzas armenias y azerbaiyanas en Nagorno Karabaj.
El conflicto de Nagorno Karabaj se remonta a 1988, año en que este territorio de población mayoritariamente armenia decidió separarse de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
«Llamamos a todas las partes del conflicto a hacer todo lo posible para evitar una nueva guerra«, dijo en una rueda de prensa.
Stano también instó a todas las partes de la región a contribuir a distender la situación en Nagorno Karabaj.
«Estamos al tanto de que distintas fuerzas apoyan diferentes partes del conflicto. Llamamos a todas las fuerzas en la región a contribuir a una distensión», afirmó.
El portavoz de la UE señaló que el bloque comunitario «mantendrá contactos con todas las partes para impedir que el conflicto en Karabaj se profundice«.
«También llamamos a evitar cualquier injerencia extranjera en este conflicto», subrayó.
Ambos bandos se acusan de una escalada sin precedentes desde 2016, denuncian ataques contra civiles, han declarado la ley marcial y ordenado la movilización de reservistas.
Bakú perdió el control de Karabaj y siete distritos adyacentes tras la escalada de las hostilidades entre 1992 y 1994.
Para impulsar una solución negociada del conflicto se instituyó en 1994 el Grupo de Minsk de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
El grupo está coprendido por EE.UU., Rusia y Francia e incluye además a Alemania, Bielorrusia, Finlandia, Italia, Suecia y Turquía, así como Armenia y Azerbaiyán, y la troika de la OSCE, los países que representan la presidencia de turno, la anterior y la siguiente.
Ante el escenario, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, exhortó este lunes a acabar con la «ocupación» por Armenia de una parte del territorio de Azerbaiyán, al destacar la incapacidad de la OSCE para resolver el problema de Nagorno Karabaj.
«En 30 años no han lograron solucionar ese problema y han hecho todo para que no fuera solucionado», afirmó Erdogan.
«Ha llegado la hora de acabar con la ocupación y es tiempo de saldar las cuentas, de otro modo Armenia seguirá obrando a su antojo. Debe abandonar las tierras ocupadas porque todos saben que son tierras de Azerbaiyán», dijo en Estambul.
Por su parte, Armenia denunció este lunes que Turquía está directamente involucrada en las acciones militares en la zona del conflicto de Nagorno Karabaj «y está enviando mercenarios extranjeros a Azerbaiyán», ha declarado el Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia.
«Durante la actual agresión de Azerbaiyán contra Karabaj, las actividades de Turquía se caracterizan por una presencia directa en el campo de batalla. Especialistas militares turcos que usan armas turcas, incluidos drones y aviones militares, están luchando con los azerbaiyanos», reza el comunicado emitido por la Cancillería armenia.
Azerbaiyán insiste en recuperar su integridad territorial, mientras que Armenia defiende los intereses de la autoproclamada República de Nagorno Karabaj, que no es parte de las negociaciones.
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