La Defensoría del Pueblo de Colombia abogó este jueves 15 de octubre por una reunión entre el presidente Iván Duque y representantes de la minga indígena que se dirige a Bogotá. Los integrantes de los pueblos originarios anunciaron que se movilizarían para protestar contra la violencia que los afecta y el despojo de sus tierras.
«En varias oportunidades se ha manifestado el valor del diálogo franco y sereno, como de la vocación mediadora de la Defensoría del Pueblo, para lograr el acercamiento de las partes y propiciar acuerdos en beneficio de los pueblos indígenas«, dice el comunicado de la Defensoría, que pone a disposición, para esta reunión, su sede en la capital colombiana.
Asimismo, se ofrecen para acompañar y brindar asistencia, incluyendo el traslado, a una comisión del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), que participa en la manifestación, desde su sede en Cali hasta Bogotá.
Desde la Defensoría del Pueblo, además, pidieron a los participantes de la minga indígena que «realicen su legítimo derecho a la protesta sin exponer su salud, y la de los demás, a los riesgos sanitarios existentes», debido a la pandemia del coronavirus.
«El momento que vivimos exige de todos responsabilidad y sentido del otro», añaden desde el organismo, que también pidió evitar que la manifestación afecte los derechos de terceros que no están involucrados en la protesta.
En ese sentido, la Defensoría instó a la minga a impedir el cierre de vías, puesto que perjudica «a ciudadanos que necesitan de ellas para producir y movilizarse».
La movilización partió el pasado sábado en el municipio de Quilichao (Cauca), a unos 55 kilómetros de distancia de Cali. Asisten miembros de los resguardos indígenas del suroccidente del país, integrantes del CRIC, así como campesinos, población afro y movimientos sociales.
Los indígenas estuvieron concentrados en Cali, hasta donde exigían que viajara el presidente Duque para llevar a cabo un encuentro. Ante la negativa del mandatario —que envió una comisión de alto nivel—, decidieron partir a Bogotá, ciudad a la que esperan llegar el próximo lunes, según un cronograma compartido por el CRIC.
En el pliego de peticiones de los manifestantes se encuentran cuatro puntos principales: la vida, el territorio, la democracia y la paz.
Este año, a pesar del confinamiento por la pandemia del coronavirus, por lo menos 40 líderes indígenas fueron asesinados hasta junio pasado. Entretanto, la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) ha registrado 242 homicidios de indígenas desde la firma de los acuerdos de paz, en 2016.
Fuente: RT.