Hoy lunes 19 de octubre, al cumplirse exactamente un año desde que se inició la rebelión popular en Valparaíso, las porteñas y porteños se auto convocaron para conmemorar dicha fecha.
A partir de las 15 horas comenzaron a congregarse en la Plaza Victoria, para luego marchar por Avenida Pedro Montt hacia el Congreso Nacional.
Con cánticos, lienzos y pancartas, resaltando nuevamente las consignas centrales de las grandes movilizaciones del año pasado, tales como la “renuncia de Piñera” y la realización de una “Asamblea Constituyente soberana”, las y los manifestantes se movilizaron hacia el edificio legislativo, interrumpiendo el tránsito de la principal vía del plan de Valparaíso y realizando barricadas espontáneas con cartones y otros materiales recolectados en los alrededores.
Desde una observación – parcial y subjetiva por cierto- me atrevería a manifestar que me llamó la atención de no ver muchos rostros conocidos de militantes sociales y políticos pertenecientes a los partidos de la Nueva Mayoría, quienes participaban masiva y entusiastamente en las actividades rebeldes del año 2019. Me permito aventurar, al mismo tiempo, que es probable que esto pueda deberse a indicaciones de las respectivas colectividades en donde militan, para evitar participar en protestas callejeras que pudiese alterar “el orden público”, lo que podría comprometer el normal y pacífico desarrollo del Plebiscito del próximo domingo 25. De igual forma, era notoria la poca propaganda del “apruebo”, en medio de una enorme cantidad de banderas mapuches y de otras colectividades y orgánicas políticas.
La inmensa mayoría de los y las participantes en esta movilización estaba constituida por jóvenes y muchachas, los que detuvieron su marcha a la altura de la calle Uruguay, aún cuando algunxs llegaron hasta las puertas del Congreso, manteniéndose en dicho lugar hasta la intervención represiva de las Fuerzas Policiales. Un helicóptero institucional monitoreó desde las alturas la movilización y las fuerzas policiales hicieron su aparición a la altura del edificio legislativo, desde distintos sectores y en forma simultánea, con un gran contingente de personal y vehículos, desplazándose en bloque, coordinadamente, por las calles Pedro Montt, Victoria y Chacabuco, con una estrategia de “copamiento territorial”, acompañados por el sobrevuelo del helicóptero.
Utilizando sus potentes “medios disuasivos químicos”, fueron dispersando y acorralando hacia el sector de la Plaza Victoria a las y los manifestantes, quienes en pequeños grupos, ubicados en diferentes lugares del plan y en la subida de algunos cerros, seguían con su protesta rebelde.
Numerosos rayados fueron realizados a lo largo del desplazamiento de Avenida Pedro Montt, entre los cuales vale la pena resaltar el realizado en homenaje a Aníbal Villarroel, Joven poblador de La victoria asesinado ayer en Santiago.
En otros se podían leer consignas exigiendo la libertad de lxs presxs políticxs de la revuelta, como también advirtiendo que no basta con aprobar, sino que es necesario seguir organizándose y luchando para poder lograr una verdadera Asamblea Constituyente, que nazca desde los territorios y con verdadero protagonismo popular, y no con la mediación de la clase política institucional.
Hasta el momento en que escribo estas líneas, las manifestaciones rebeldes para conmemorar un año desde que se inició la rebelión popular de octubre del 2019 acá en la ciudad Puerto, seguían expresándose con energía, en distintos lugares de Valparaíso.
Por Guillermo Correa Camiroaga, Valparaíso 19 de Octubre 2020.