Si la Constitución francesa no permite tomar las medidas necesarias para combatir el terrorismo, «es necesario modificarlas», así lo ha dejado ver el alcalde de Niza, Christian Estrosi.
«La democracia es el cumplimiento de la Constitución. Si nos obligan a cumplir puntos que no sirven en medio de una guerra (contra el terrorismo), (…) entonces es necesario modificar la Carta Magna», dijo el alcalde de Niza a la emisora de Radio Europe 1.
Estrosi, que comparó el terrorismo y el coronavirus, señaló que esa contienda contra los extremistas no se puede ganar con «leyes pacíficas».
«Con la llegada del covid-19, privamos a los franceses de ciertas libertades, algo que ellos aceptaron como parte de la lucha contra el virus. El islamismo es un virus, las bombas explotan constantemente en nuestro territorio«, subrayó Estrosi.
Un radical atacó el jueves con un arma blanca a varias personas en la catedral de Notre Dame de Niza, casi decapitando a un hombre y a una mujer, la tercera víctima murió en una cafetería cercana como consecuencia de las heridas recibidas.
El agresor resultó herido durante una rápida detención. Según el alcalde de Niza, el atacante repetía sin cesar «Alá Akbar».
La Fiscalía Antiterrorista abrió investigación, su jefe confirmó que según la documentación encontrada, el detenido nació en 1999 y procede de Túnez.
Tras el atentado cometido en Niza, en Francia se introdujo, a escala nacional y al máximo nivel, el plan de lucha contra el terrorismo Vigipirate.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, al llegar a Niza, calificó lo sucedido como un ataque terrorista y anunció que se fortalecerá la protección de los lugares de culto religioso y de las escuelas, además se movilizarán militares adicionales en el marco de la operación antiterrorista Sentinelle.
El crimen ocurrido en Niza es el segundo homicidio reciente perpetrado en Francia por un radical armado, tras el asesinato del profesor de historia Samuel Paty, decapitado por un terrorista en la comuna de Conflans-Saint-Honorine el 16 de octubre, por haber mostrado a los alumnos una caricatura de Mahoma durante una clase dedicada a la libertad de expresión.
Macron, al intervenir en la ceremonia nacional de despedida del profesor, el pasado día 21, declaró que Francia no renunciará a las caricaturas y seguirá defendiendo la libertad de expresión, lo que provocó una reacción negativa en el mundo islámico.
Con información de Sputnik
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