El presidente electo de Estados Unidos (EE.UU.), Joe Biden, centrará sus primeros 10 de días de gobierno en atender la crisis de la pandemia del Covid-19 en el país, el más afectado por el virus.
De acuerdo con un despacho de Prensa Latina, en un memorando, los asesores de Biden describen tales acciones ejecutivas como una disposición urgente para hacer frente a las crisis más serias en la historia moderna de la nación.
Entre las medidas que se tomará – detalló Ron Klain, el jefe de gabinete entrante del próximo jefe de la Casa Blanca–; se encuentra el uso obligatorio de las mascarillas como requisito para permanecer en terrenos o instalaciones de propiedad federal y en viajes interestatales, y además extenderá una pausa sobre desalojos e hipotecas.
De igual forma, se implementará un plan de 1.900 billones (millones de millones) de dólares para combatir los daños del coronavirus, máxima prioridad para la nueva administración, para atender a los afectados por la pandemia.
La Casa Blanca dedicará los ocho días restantes a instruir a su gabinete para impulsar la ayuda económica destinada a paliar los efectos de la pandemia y emprender acciones ejecutivas en temas como la reunificación de los niños separados de sus familias tras cruzar la frontera, entre otros.
De igual forma, se prevé tomar medidas para mitigar la propagación mediante la expansión de las pruebas sobre la Covid-19, la protección de los trabajadores y el establecimiento de claros estándares de salud.
Por otra parte, la nueva administración prevé reincorporar el país al acuerdo sobre el Cambio Climático de París y deshacer la prohibición de viajar a Estados Unidos a ciudadanos de siete países de mayoría musulmana, una medida implantada por el presidente saliente Donald Trump.