El Estado impondrá sanciones contra los restaurantes que decidan abrirse para el público violando las restricciones impuestas por la pandemia del covid-19, informó este lunes el portavoz del Gobierno de Francia, Gabriel Attal.
Los restaurantes permanecen cerrados en Francia desde hace más de tres meses. En primavera de 2020, durante la primera ola de la pandemia, no pudieron recibir al público durante varios meses. Tal situación decepciona a muchos representantes de este negocio, algunos anunciaron la decisión de abrir pese a las limitaciones vigentes.
«Hemos decidido que los gastrónomos que infrinjan las reglas y decidan abrir sus establecimientos mientras éstos deben estar cerrados, tendrán cerrado por un mes el acceso al «fondo de solidaridad», y si lo vuelven a repetir, hasta el fin de la crisis sanitaria», dijo Attal al micrófono de la emisora de radio France Info.
Las autoridades francesas prestan apoyo financiero a los sectores que cesaron su actividad por las limitaciones impuestas durante la pandemia del covid-19, incluido el de restaurantes y bares.
Desde el 15 de diciembre en Francia rige el toque de queda, primero se impuso desde las 20.00 hasta las 06.00, y a partir del 16 de enero, desde las 18.000 hasta las 06.00. En el país siguen cerrados los museos, teatros, cines, restaurantes y bares. A partir del 31 de enero se cerraron los comercios grandes.
Más de tres millones de personas contrajeron el coronavirus en Francia desde el comienzo de la pandemia, más de 76.000 pacientes fallecieron. La campaña de vacunación empezó en el país el 27 de diciembre. Las primeras dosis de vacunas ya se aplicaron a más de 1,5 millones de personas.
Fuente: Sputnik
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