Vecinos de Valparaíso en vilo por antena de ENTEL

Tensos momentos se viven en Valparaíso por el resguardo policial dado a la instalación de una antena de telefonía celular en el Cerro Esperanza. El rechazo de los vecinos choca con el silencio de las autoridades.

Los vecinos del Cerro Esperanza de Valparaíso realizaron este viernes una protesta en las esquina de Manuel Rodríguez con 21 de Mayo en rechazo a la instalación de una antena de celular de ENTEL.

Pese a que la antena implica poner una torre de 30 metros, la empresa no requiere del permiso municipal de obras y la Subsecretaría de Telecomunicaciones “se lava las manos” -según señalan los vecinos del sector. Incluso hay carabineros resguardando el acceso del recinto en espera de los trabajadores de ENTEL.

Durante la semana pasada los vecinos del Cerro Esperanza evitaron otros intentos de ENTEL por instalar la antena. Daniel López, presidente de la Junta de Vecinos, contó a El Ciudadano que el sábado 25 de abril los vecinos no dejaron pasar a la camioneta con los operarios que iban a instalar la antena. “Lamentablemente es la única respuesta que tenemos como vecinos. Ellos llegan sin permiso de obras, no informan que van a instalar una antena y nosotros hasta para levantar una reja debemos pedirlo” -señaló López.

“Encontramos que el descaro no tiene limites: entran a instalar una artefacto que emite radiaciones electromagnéticas en tu barrio, colocan una torre que en promedio mide 30 metros, Subtel se lava las manos, la dirección de obras y Minvu «MAL INTERPRETAN» la ley y no exigen permiso de obra para instalar semejante estructura y ahora ocupando recursos de todos, colocan un dispositivo de Carabineros de punto fijo para resguardar la instalación” -acusan los vecinos del cerro Esperanza.

Para este sábado organizan una manifestación en la que asistirán concejales y vecinos de otros barrios.

Si bien aún no hay estudios concluyentes respecto del daño que causan las antenas, científicos han señalado que la contaminación electromagnética provocada por estas antenas podría provocar esclerosis lateral amiotrófica, Alzheimer, dermatitis, enfermedades alérgicas, asma bronquial, aumento de incidencias de abortos, alteraciones neuroconductuales, cardíacas y endocrinas, entre otras patologías.

Como no hay estudios concluyentes lo más indicado es que se adopte el principio precautorio antes de seguir permitiendo que las ciudades se sigan llenando de antenas celulares. Este principio fue reconocido en el protocolo sobre seguridad de la biotecnología, del Convenio sobre la Diversidad y ha sido incorporado en las legislaciones de Suiza, Australia, Alemania, Canadá, Francia, Holanda, Nueva Zelanda, Suecia, Brasil, Colombia y Ecuador, entre otros.

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El Ciudadano