La ciudad de Río Tercero, Argentina, decidió no adherirse a los tres días de duelo nacional decretados por el Gobierno de Alberto Fernández, por la muerte del expresidente Carlos Menem, quien falleció este domingo a los 90 años.
De acuerdo con la agencia de noticias rusa Sputnik, la declaración recordó el rencor de la ciudad por la responsabilidad del exmandatario en una serie de trágicas explosiones ocurridas en 1995 y vinculadas con la venta ilegal de armas.
“El 3 de noviembre de 2020, cuando se conmemoraba el 25 Aniversario de las explosiones de la Fábrica Militar, el Intendente Marcos Ferrer firmó el Decreto 638/2020 donde se declaró persona no grata a Menem”, refiere en la red social la municipalidad.
En la década de 40, se instaló en Río Tercero una fábrica militar, la cual tenía objetivo suplir la imposibilidad de importar armamento producto de la Segunda Guerra Mundial.
La fábrica se encargó de producir materia prima para la producción de pólvoras, explosivos, entre otros insumos para la producción de armamento.
En noviembre de 1995 se registraron tres explosiones dentro de la fábrica, que generó que miles de proyectiles salieran disparadas, impactaran a varios barrios de la ciudad, dejando un saldo de 200 heridos y siete personas muertas, además de daños estructurales de vivienda y escuelas.
Menem aseguró que fue un accidente, no obstante, se comprobó que no fue un simple accidente, debido a que en las investigaciones de demostró que los tanques de trinitrotolueno (TNT) no explotan al menos que se coloque un detonador, cumpliendo con la teoría de que las explosiones fueron intencionales.
Según varios empleados, un día antes de la explosión ingresaron a la fábrica “personas no identificadas”, quienes podrían ser los causantes de colocar los detonadores.
Durante varios años de investigación, refiere la agencia de noticias, se logró relacionar las explosiones con la venta ilegal de armas argentinas a Croacia y Ecuador.
Cabe destacar que Menem fue hallado culpable por esta causa, y fue el único presidente que fue imputado y pagó una condena de seis meses con prisión domiciliaria.