Un tiroteo registrado el pasado martes en la ciudad estadounidense de Atlanta, destapó un tipo de agresión y racismo, que ha recrudecido el último tiempo en ese país, gatillo en particular con la llegada de la pandemia del Covid-19 y un discurso de xenofobia que reflotó en gran medida con la llegada de Trump a La Casa Blanca, desde donde emitió discursos de odio, estigmatizando y culpando a sectores de la ciudadanía de los males que no podía controlar o resolver.
Un estudio realizado por la Universidad de California en San Francisco (UCSF) –citado por el portal Univisión – reveló que un tweet del expresidente Trump -cuando apareció el Covid-19- de este refiriéndose al COVID-19 como «virus chino», hizo explotar el ataque contra los migrantes de origen asiático residentes en el país.
De acuerdo con la investigación, se examinaron aproximadamente 700.000 tweets, una semana después del 16 de marzo, fecha en la que Trump se refirió al Covid-19 como “el virus chino” o el “virus de Wuhan”.
Entre los 1.3 millones de hashtags que se registraron esa semana haciendo referencia al COVID-19, los más usados fue #chinesevirus, la cual venía acompañado con otras etiquetas cómo #yellowmanfever, #commieflu, #disgustingchinese y #makethecommiechinesepay, entre otros.
A este análisis se le suma las recientes investigaciones realizadas por la encuestadora Stop AAPI, en la que se evidencia que, en tan solo un año, se registraron 3.800 incidentes y acoso verbal contra los estadounidenses que residen en el país de origen asiático.
68% de los incidentes que se registraron en el último año tiene que ver con el acoso verbal y el rechazo, mientras que el 11% ya llegó a la violencia física. Es más, los informes revelan un aumento de 150% de rechazo a la comunidad china en las principales ciudades de EE.UU.
No obstante, se asegura que estas acciones fueron promovidas no solo por las palabras de Trump, sino también por la política exterior que ha promovido el actual mandatario, Joe Biden, quien no ha decidido aún que hacer en las relaciones con China.
En un viaje reciente a Atlanta – tras la masacre –, Biden instó a la comunidad “parar con el racismo”.
«El odio no puede encontrar un refugio en Estados Unidos. Nos corresponde a todos detenerlo», dijo Biden al tiempo que expresó – sin hacer referencia a Trump – “las palabras tienen consecuencias”.
“Esto es (porque les culpan por) el coronavirus, y punto”, recalcó.
Ataques sexuales: Otra muestra del racismo contra asiáticas
Los ataques verbales y hasta físicos contra los asiáticos, desmanteló una red mucho más grande.
Según varias declaraciones, entre ellas las del propio pistolero, que esto no fue un ataque de “racial” sino de “adicción sexual”.
De acuerdo con el Diario Semana, existe evidencia de que la mayor parte del odio, a diferencia de otros tipos de delitos de prejuicio, se ha dirigido a las mujeres.
Solo en San Francisco y Oklahoma se emitió alerta tras el aumento de ataques contra los estadounidenses de origen asiático, sobre todo mujeres.
La alerta se emitió después de que esta semana, una mujer identificada como Xiao Zhen Zie, de 75 años, fuese víctima de un brutal ataque que la dejó con dos ojos morados y otras lesiones graves.
EE.UU. no es el único
Las palabras no solo se quedaron en EE.UU. El discurso xenófobo de Trump viajó a otros países, entre ellos uno muy cercano a ellos: Canadá.
Según adelanta Radio Internacional Canadá, en un informe –que será publicado este martes– se revela que ya van mas de mil casos de racismo asiático desde el inicio de la pandemia.
Los datos demuestran que las mujeres asiáticas se ven afectadas de forma desproporcionada por la violencia racial.
Dicho informe – realizado por diferentes encuestadoras – revela que el 60% de los ataques e incidentes son realizados a mujeres, de los cuales 30% han terminado en violencia física.
Solo en Vancouver se ha registrado un aumento del 878% en la violencia contra los asiáticos, y en Montreal la policía ha registrado un aumento del 16% en la violencia contra la comunidad asiática.