Constanza San Juan Standen es Licenciada en Historia de la Universidad de Chile y avecindada desde hace 15 años en San Félix, Guasco Alto. Activista socioambiental, Vocera de la Asamblea por el Agua de Guasco Alto y en esa condición, integrante del Movimiento por el Agua y los Territorios (MAT) y de la Coordinación de Territorios por la Defensa de los Glaciares.
Fue levantada como candidata a la Convención Constitucional (CC) por el distrito 4 desde los movimientos y asambleas a las que pertenece, otorgándole legitimidad colectiva. La suya es una lista de independientes de la Asamblea Constituyente Atacama (ACA), con el apoyo de la Lista del Pueblo.
Actualmente participa en el diseño y la ejecución de la estrategia comunitaria, comunicacional y jurídica que, en septiembre de 2020, consiguió el fallo de clausura del megaproyecto minero Pascua Lama, y que se opone a la instalación de megaoperaciones mineras en las nacientes de las aguas sobre glaciares, en la alta cordillera de Atacama.
«Nuestra convicción de la necesidad urgente de poner fin al modelo económico, social y político que rige en Chile viene de la experiencia. Como comunidad, hemos luchado más de 20 años contra un megaproyecto minero que destruyó glaciares en la alta cordillera del Valle del Huasco y provocó daños comprobados e irreparables, tanto al medioambiente como a la salud humana.» señala Constanza San Juan.
Como lista proponen que los territorios tengan el derecho básico a la autodeterminación y a tomar decisiones sobre su vida. Además de la garantización irrestricta de todos los demás derechos fundamentales: educación, salud, trabajo, vivienda y pensiones, entre otros. «Para que nunca más comunidades empobrecidas queden a merced de empresas inescrupulosas, que se valen de las necesidades de la gente. Ofrecen servicios básicos y prometen «progreso» a las comunidades, pero el precio es que acepten convertirse en zonas de sacrificio y la muerte de sus propios territorios.» denuncia la candidata.
Constanza San Juan plantea como uno de los nortes principales de la nueva constitución que la naturaleza sea declarada sujeto de derecho. Esto implica, entre otras cosas, que los elementos que sustentan la vida en este planeta dejen de ser mercantilizados y pasen a ser bienes comunes protegidos, con el fin de darle continuidad a la vida de todas las especies que pueblan la Tierra, tanto hoy como en el futuro. «En ese sentido, la naturaleza debe estar protegida por su mera existencia y se deben respetar sus ciclos. Esto implica que las actividades productivas deben tener límites y esto son los derechos de la naturaleza y los derechos humanos«, señala.
«Hemos adquirido un conocimiento valiosísimo que debería quedar plasmado en una nueva Constitución: el respeto y la defensa de la vida en toda su diversidad y formas, el resguardo del bien común, la garantía de derechos sociales fundamentales, y la autodeterminación de los pueblos en sus territorios.” concluye Constanza San Juan.