Francis Suárez, alcalde de Miami (Florida), que busca posicionar a la ciudad como un centro para la minería de criptomonedas, anunció esta semana que está invitando a las empresas mineras extranjeras, entre ellas chinas, a establecer sus centros de datos en la localidad.
«Queremos asegurarnos de que nuestra ciudad tenga la oportunidad de competir», declaró en una entrevista a CNBC. «Estamos hablando con muchas empresas y diciéndoles: ‘Oigan, queremos que estén aquí'», agregó.
La minería de criptomonedas es un proceso en el que los mineros utilizan la potencia informática para procesar transacciones y obtener divisas digitales. No dependen de la ubicación: todo lo que necesitan es un equipo y una buena conexión a Internet. Sin embargo, lo que varía de un lugar a otro es el coste de la energía. Y, en última instancia, lo que más les importa es encontrar la fuente de energía más barata para aumentar sus beneficios.
El funcionario –que es un defensor de la criptografía y posee tanto bitcóin como ether– destacó la importancia de la energía nuclear en Miami como fuente de energía limpia y barata. «El hecho de que tengamos energía nuclear significa que es una energía muy barata», dijo. Señaló que está en conversaciones con Florida Power & Light Company para decidir cómo reducir aún más el precio de la energía. «Entendemos lo importante que es esto. Los mineros quieren llegar a cierto precio de kilovatios por hora. Y estamos trabajando con ellos en eso», subrayó.
Suárez también está considerando una combinación de otros incentivos, como las zonas empresariales específicas para la criptominería. Se trata de áreas en las que se ofrecen a las empresas concesiones fiscales, incentivos en materia de infraestructuras y una reducción de la normativa, con la esperanza de que estas exenciones fomenten la inversión y creen puestos de trabajo.
Además, Miami quiere convertirse en un destino criptográfico para todo tipo de profesionales interesados en este espacio y para atraerlos, el alcalde ha intentado que el bitcóin se convierta en la divisa principal, abogando por políticas que permitan pagar a los empleados de la ciudad y a los residentes sus impuestos en esta criptomoneda. Las autoridades están estudiando la posibilidad de tenerla como activo en su balance.
Medidas contra el sector
Las declaraciones de Suárez se produjeron en un momento en el que aumentan las medidas represivas contra el sector, especialmente en China, que representa más de la mitad de la producción mundial de bitcoines.
Este jueves, los mineros en Ya’an, uno de los principales centros de minería de criptomonedas en la provincia china de Sichuan, recibieron un aviso de inspección que requería cierres. Mongolia Interior, Xinjiang y Qinghai anteriormente ordenaron el cierre de las operaciones mineras.
Al mismo tiempo, frente al creciente compromiso de la comunidad internacional respecto a la protección del medioambiente, surgieron preocupaciones de que la producción de la criptomoneda tiene un gran impacto negativo sobre los esfuerzos por prevenir el cambio climático.
Cortesía de RT
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