Un total de 44 muertes atribuidas a la Fuerza Pública de Colombia se han registrado en el marco de las protestas contra el Gobierno, que comenzaron el pasado 28 de abril y que se mantienen en la actualidad en algunos puntos del país, dijo a Sputnik el portavoz de la organización no gubernamental (ONG) Temblores, Alejandro Lanz.
«Desde el 28 de abril hemos venido reportando con mucha preocupación el incremento de la violencia por parte de la Fuerza Pública. En el más reciente informe, emitido el lunes, logramos verificar que con corte al 26 de junio se han producido 44 homicidios cuyo presunto agresor es un miembro de la Fuerza Pública», informó Lanz.
El informe, publicado en conjunto con el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), reveló también que «hay otros 29 homicidios en proceso de verificación«. De esas 29 muertes de civiles, «13 están en proceso de esclarecimiento sobre si el presunto victimario pertenecía a la Fuerza Pública, cuatro son atribuibles a civiles armados en los que existen indicios de posible participación de la Fuerza Pública, y nueve están en proceso de verificación del escenario y contexto del hecho», agregó.
Mientras, Temblores e Indepaz buscan verificar la autenticidad de otras tres denuncias de muertes por parte de la Fuerza Pública, las cuales hacen parte del total de 29 que están en verificación.
Durante las protestas, convocadas por las principales centrales obreras del país en contra del Gobierno, pero a las que luego se adhirieron diferentes sectores sociales, también se han registrado 1.617 víctimas de violencia física y 82 de agresiones oculares, «una práctica que no se había visto en tal magnitud en manifestaciones sociales anteriores», acotó Lanz.
El vocero también destacó que en el marco de las protestas «se ha recrudecido la práctica de violencia sexual«, en especial contra las mujeres, dentro de los cuales el informe de Indepaz y Temblores registró 28 casos. También destacó la observancia de prácticas como las «detenciones arbitrarias», y aseguró que han identificado cómo la policía «oculta la identidad de las personas y les impide conectarse con un familiar o con su abogado».
Lanz dijo que, de acuerdo con los reportes de los afectados, los policías «les ocultan el destino al cual van a ser trasladados y los mantienen incomunicadas por mucho tiempo, lo cual es una práctica muy lesiva de ocultamiento de la persona que puede constituir desaparición forzada«.
A su vez, el número de víctimas de armas de fuego, en los cerca de dos meses de protestas que abarcó el informe, también es alto, 228 personas afectadas.
«Hemos advertido desde hace ya bastante tiempo cómo la utilización de armas de fuego en espacios públicos para reprimir protestas causa un daño muy grande a la vida e integridad de los manifestantes», indicó Lanz.
Notificó que el informe sólo refleja las afectaciones de la Fuerza Pública hacia los civiles, pero no al contrario, y dijo que se espera que el reporte sirva para que «las investigaciones procedan y puedan terminar en una sentencia condenatoria» de los responsables.
Según el Gobierno de Colombia, en el marco de las protestas han muerto 25 personas y en tres de los fallecimientos se comprobó la participación de miembros de la Fuerza Pública.
Las denuncias de violaciones a los derechos humanos en el país durante tales manifestaciones motivaron una visita, del 7 al 10 de junio, de delegados de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Fuente: Agencia Sputnik.
Hazte socio 👍
Con tu donación aportas a la sostenibilidad económica y existencia de este medio.
Elige cómo quieres aportar a la existencia y financiamiento colectivo de este medio!
Reveniu 
