Tras la vergonzosa suspensión de la primera sesión de la Convención Constitucional (CC) este lunes, por no contar los delegados con las condiciones técnicas para sesionar en diferentes salas del ex Congreso Nacional, se confirmó que la empresa contratada para realizar la fallida producción pertenece a Paul Morrison, hijo de María Angélica Cristi, ex diputada y también ex alcaldesa de Peñalolén, designada directamente por Pinochet en los años ’80 (ver Linkedin acá).
Recordemos que en esta primera sesión no funcionaron micrófonos, cámaras y otros elementos necesarios para realizar las sesiones de la instancia, que tiene a cargo la redacción de la propuesta de nueva Constitución. Sin embargo, la empresa recibió un pago de 450 millones de pesos, lo cual generó molestia y reacciones en las distintas redes sociales, donde además, se entregaron otros antecedentes -incluso policiales- sobre Morrison y sus contratos con el Estado y con el municipio de Maipú (ver nota de Interferencia sobre este caso acá).