«Muy bien voy a preguntar, por ti, por ti, por aquel, por ti, que quedaste solo y el que murió sin saber» (Víctor Jara)
1.- En un día como hoy se recuerda uno de los actos más hermosos de nuestra historia como país, la nacionalización del cobre. Ya llegará el momento en que por decisión y acción de sus ciudadanos, el Estado recupere el control de las minas de cobre y todas las riquezas básicas, así como el control de las aguas, la electricidad, las telecomunicaciones, para que de una vez por todas los capitalistas no sigan enriqueciéndose a costa de nuestras carencias. Hagamos algo de historia.
La lucha por la nacionalización de nuestras riquezas básicas tiene algo más de un siglo de historia, como testimonia el artículo publicado el 11 de agosto de 1920, por Luis Emilio Recabarren en el diario El Socialista de Antofagasta: “Los problemas de la miseria y de la esclavitud no terminarán mientras tanto la clase obrera se resigne a sufrir la actual organización social. Nacionalicemos las industrias extractivas. Nacionalicemos las minas de carbón, las salitreras, los bosques, el cobre, la agricultura y procedamos a que toda la industria muy nacionalizada sea administrada bajo el control de comisiones nombradas por el gobierno o las municipalidades respectivas”.
El primer proyecto de ley de nacionalización del cobre, que se presentó en el Congreso Nacional, fue elaborado por los senadores Salvador Ocampo y Elías Lafertte, el 21 de julio de 1951. En este proyecto se disponía la expropiación de las empresas de la gran minería por el monto de su declaración de capitales que alcanzaba en esa época a los 53,5 millones de dólares por las tres empresas existentes a la época. Salvador Allende contempla la nacionalización de la Gran Minería del Cobre, en sus cuatro programas como candidato a la Presidencia de la República, a partir de 1952.
En 1961, los senadores socialistas Salvador Allende, Raúl Ampuero, Salomón Corbalán, Aniceto Rodríguez, Alejandro Chelén, Adolfo Quinteros y Galvarino Palacios, presentaron el segundo proyecto de nacionalización del cobre, mediante el cual se expropiaba a las empresas norteamericanas según el valor declarado en Impuestos Internos, y se procedía a la creación de la Empresa Nacional del Cobre, que explotaría los bienes expropiados y comercializaría el cobre. Este proyecto, así como el de Ocampo y Lafertte, nunca fue objeto de mayor estudio en el Senado.
Radomiro Tomic (DC de los poco buenos que ha habido), sostuvo el 18 de junio de 1961 en el Senado: «Es obvio que mientras pretendamos, no sólo en lo formal, sino que en lo real, ser un Estado soberano, el control del cobre debe estar en manos de los poderes públicos del Estado de Chile. Y no en las empresas extranjeras».
Finalmente la gran minería del cobre se nacionaliza, por la unanimidad del Congreso Nacional, el 11 de julio de 1971 fecha que hasta hoy se conoce como Día de la Dignidad Nacional. El 15 de Julio el presidente Allende firmó la ley que ratificaba esta decisión del Congreso. Con el ‘Sueldo de Chile’, se lograría la ‘Segunda Independencia’ que permitiría construir una nueva economía para resolver todos los problemas sociales y económicos de las generaciones actuales y futuras. Nunca debemos renunciar a este anhelo.
2.- Un cogollito para compartir con los cientos de compas, quienes luego de leer uno de nuestro Pulsos hicieron llegar sus saludos y buenas vibras para la compañera María Ester Feres. Ella se ha comunicado con nosotros y junto con agradecer la publicación nos pide saludar a todos los que le expresaron su cariño y afecto a través del programa de radio y del Facebook. De la misma manera saludamos los comentarios que recibieron nuestros conceptos respecto de Luisa Toledo, además de hacer llegar a todos sus familiares y compañeros nuestro pesar por su partida.
Nuestra fuerza la Unidad Nuestra meta la Victoria
Por Manuel Ahumada Lillo
Secretario CGT Chile
Publicado originalmente el 11 de julio de 2021 en Pulso Sindical